Niños migrantes son principales víctimas del trabajo infantil, indica comisión episcopal
La Comisión Episcopal de Migrantes e Itinerantes de Argentina (CEMI), señaló que los niños migrantes son las principales víctimas del trabajo infantil y animó a continuar con los esfuerzos por estos pequeños que necesitan del generoso servicio de la sociedad civil y de la Iglesia en el país.
En su mensaje por el Día Mundial Contra el Trabajo Infantil propuesto por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la CEMI señaló que son principalmente los niños “quienes más sufren las graves consecuencias de la migración, casi siempre causada por la violencia, la miseria y las condiciones ambientales”.
“Son numerosos los que forman parte de nuestras comunidades, barrios y ciudades, venidos en su mayoría de los países limítrofes de nuestra Patria”, agregó.
El 12 de junio se conmemora el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, que este año lleva como lema: “¡Actuar ahora: poner fin al trabajo infantil!”.
La comisión episcopal indicó que muchos de los migrantes han sido “estigmatizados o excluidos” y afirmaron que “migrar no es un delito”.
“Son hermanos nuestros que buscan una vida mejor lejos de la pobreza, del desempleo, de realidades muy adversas”, añadió.
Sin embargo, recordó que son incontables los migrantes “que no logran tener aquí un mejor pasar y siguen en situaciones de indigencia y precariedad” y subrayó que son los niños que “terminan con frecuencia en la calle, abandonados a sí mismos y víctimas del trabajo infantil”.
“Vemos dentro de la itinerancia, como en el turismo, muchos niños se encuentran trabajando en lugares turísticos, en las calles y rutas mendigando”, lamentó.
La CEMI señaló que, como consecuencia de la pandemia, han aumentado las “conductas detestables como el tráfico de niños, la explotación laboral y sexual, el abuso, y, en general, la privación de los derechos propios de la niñez sancionados por la Convención Internacional sobre los Derechos de la Infancia”.
Por ello, la comisión episcopal indicó que se une a los “Compromisos de Acción 2021” de la OIT, que se basan en tres estrategias: “Actuar: identificación de los compromisos de acción para el año 2021. Inspirar: divulgar historias y experiencias sobre la erradicación del trabajo infantil. Ampliar: compartir ideas con agentes aliados del cambio”.
“Estos niños y niñas necesitan de nuestra ayuda y de nuestro generoso servicio como sociedad civil y como Iglesia en Argentina”, agregó.
Finalmente, pidió a los ciudadanos no cansarse en “dar con audacia un buen testimonio del Evangelio, que nos llama a reconocer, a denunciar y a defender al mismo Jesús presente en los más pequeños y vulnerables”.
A nivel mundial, la OIT indicó que el trabajo infantil se ha reducido en 38% en el último decenio, sin embargo, resaltó que todavía hay 152 millones de niños afectados por este flagelo.
La Encuesta de Actividades de Niños, Niñas y Adolescentes (EANNA) en Argentina señaló que para el 2017 el 10% de la población de 5 a 15 años en el país realizaba “actividad productiva, con mayor incidencia en las áreas rurales (19,8%)”.
Karla Valeria says:
Nunca entenderé las madres que mandas a sus hijos a trabajar en las calles, debido a tanto peligro que hay hoy en día, sin embargo sé que lo hacen por necesidad pero me parte el alma saber que hay tantos niños ambulando en las calles.
Georgeth Pérez says:
Este es uno de los episodios más tristes, los niños deben tener sueños, estudiar, tener una vida en buenas condiciones y estar bien, no trabajando, sufriendo y viendo el mundo como un enemigo al contrario como una oportunidad.
Las madres deben de ver a sus hijos y darles la vida que merecen en paz y llena de valores.
Laura Isabel Gomez says:
La triste realidad de muchos niños , niños que deberían de estar en sus casas estudiando, teniendo los derechos que le corresponde una alimentación sana, época que debería de ser su mejor etapa su infancia la están pasando cruel, y los culpables son sus padres.
Mónica Reyes says:
Es una lamentable situación que los pequeños sean victimas de la pobreza y la calamidad que sufre la sociedad del país, su sueño tendría que ser estar estudiando, disfrutando su infancia y creando sueños de superación y buenos hábitos.
Natalie Flores says:
Es triste saber que hay niños que a temprana edad sean obligados a trabajar y arriesgarse de esa manera por culpa de la extrema pobreza que viven en su hogar, muchos de ellos dejan el estudio y su interés hacia la escuela porque ven la necesidad y muchos optan por migrar para encontrar un mejor futuro para su familia, la verdad es que yo admiro todo aquel niño que hace este tipo de cosas por amor a sus padres porque en su país no ven oportunidades.
Christian Talavera Carias says:
Que triste y lamentable es ver este tipo de noticias, ya que estos niños deberían de estar estudiando en una escuela o colegio y en vez de eso tienen que ir a trabajar arriesgando su vida desde temprana edad por pura necesidad.
Karla Melisa Velasquez Duarte says:
La triste realidad que viven los niños de muchas países. Seria bueno que las autoridades se movilicen para ayudar a estos pequeños que se encuentran en la calle sin ningún cuidado, averiguar si tienen sus familia y ellos los manda a trabajar y tomar algunas medidas hacia ellos ya que la explotación hacia un niño no debe ser ninguna, y, por aquellos que se encuentran solos buscarles un lugar donde vivir. Los niños deben vivir su niñez con alegría, cariño, y sobre todo educación, no viviendo en la calle pasando hambre, frio y todo tipo de abusos, que lamentable que los problemas sociales mas comunes en distintos países es la desigualdad, el sufrimiento que pasan estos niños.
Flor Morales says:
Los niños viven para aprender, jugar, socializar… No para que sean explotados laboralmente.
La situación es muy delicada, se ven obligados a trabajar y es algo que es inevitable dejarlo así.
Aquellos que, se van solos o con sus padres, terminan en un evento complicado y de mucha necesidad. Se debe de trabajar internamente en el país, el Gobierno debe velar por los derechos de los pequeños.
Génesis Arelis Mendoza Gonzales says:
Me da mucha nostalgia el leer esta noticia, pues son niños y pues ellos deberían estar disfrutando la vida de otra forma, estudiando, jugando en el campo con sus amigos, no haciéndolos explotar en un trabajo, pero viéndolo de otra perspectiva creo que es lo mejor, pues están aprendiendo a valorar el esfuerzo que sus padres hacen. (peor hubiese sido que estos niños estuvieran dentro de una banda criminal).
DANIELA CONTRERAS says:
El presidente Juan Orlando Hernández, debe tomar cartas en el asunto de los migrantes, sobre todo en los niños que son los más afectados, el tiene la obligación de satisfacer toda necesidad que se les presente.
Cesia Zuniga says:
Es triste ver la realidad a la que se enfrenta estos niños, quienes en esta etapa deberían de brindarsele el derecho a la educación y recreación, lastimosamente el nivel de vida de estos países obliga a numerosas familias en buscar medios de subsistencia así esto implique la explotación laboral infantil