Representantes del Gobierno piden al Papa Francisco abogar por Honduras para acceso equitativo a vacunas anticovid
Ciudad del Vaticano. Con el propósito de solicitar al Papa Francisco que abogue por Honduras ante el mundo para que haya una equidad en el acceso a las vacunas anticovid y ante la desigualdad por los efectos del cambio climático, representantes del Gobierno participaron hoy, en el Estado de la Ciudad del Vaticano, de una audiencia con el Papa Francisco.
En la cita con el Sumo Pontífice, celebrada durante la mañana antes de la misa dominical, participó el canciller Lisandro Rosales, el Secretario de Coordinación General de Gobierno, Carlos Madero, la vicecanciller Karen Najarro y el embajador de Honduras ante la Santa Sede, Carlos Cordero.
El diálogo con el Papa Francisco fue solicitado por los representantes del gobierno hondureño como parte de las gestiones que se realizan en Europa para impulsar la socialización del Plan de Reconstrucción de Honduras con representantes de gobiernos, organizaciones civiles e instituciones públicas y privadas.
Además del acceso a las vacunas durante el encuentro la comitiva de Honduras también pidió la intermediación del Sucesor de Pedro ante los severos daños que recibe el país, de forma recurrente, por los efectos del cambio climático, mientras los países industrializados reciben riqueza.
“En audiencia con el Papa Francisco, previo a la misa del Día de Pentecostés; buscamos el respaldo de un líder espiritual comprometido con la paz, la reconstrucción, la justicia social y que entiende a los pueblos latinoamericanos. En Honduras renace la esperanza.”, agradeció el canciller Rosales a través de su cuenta en Twitter luego de la audiencia.
Asimismo, en la visita también los representantes gubernamentales pidieron al Papa abogar por la reconciliación nacional.
Al finalizar la audiencia, la comitiva hondureña también participó de la homilía que ofreció el Santo Padre en el Altar de la Confesión de la Basílica Vaticana, en esta ocasión por el Día de Pentecostés y en donde inició con la promesa de Jesús a sus discípulos citada en el evangelio de San Juan, capítulo 15, versículo 26.
En ese sentido habló del tiempo del Paráclito, palabra que explicó tenía varios significados, pero esencialmente dos: consolador y abogado.
“El Paráclito es el consolador, todos nosotros especialmente en estos momentos difíciles como el que estamos atravesando a causa de la pandemia buscamos consolaciones, pero frecuentemente recorrimos solo a las consolaciones terrenas que desaparecen pronto, son consolaciones del momento. Jesús nos ofrece hoy la consolación del cielo, el espíritu, la fuente del mayor consuelo”, resaltó el Papa Francisco.
En la homilía se refirió también como las ideologías separan, dividen. “Hoy, si escuchamos al espíritu no nos concentraremos en conservadores y progresistas, tradicionalistas e innovadores, derecha e izquierda. Si estos son los criterios, quiere decir que en la Iglesia se olvida el espíritu. El Paráclito impulsa a la unidad, a la concordia, a la armonía en la diversidad”, subrayó.
Por su parte, el Secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede, Paul Richard Gallagher, quien estuvo presente en la inauguración de las nuevas instalaciones de Honduras en el Vaticano, reconoció los grandes desafíos que tiene Honduras en ese momento y los esfuerzos que se realizan para enfrentarlos.
“Nosotros también de parte de la Santa Sede vemos eso como un gran compromiso de parte de ustedes (el Gobierno), sus relaciones con la Santa Sede, su diálogo con el Santo Padre, también con nosotros de la curia romana, la Secretaría de Estado”, dijo Gallagher.
Jennifer Castro says:
Con que cualidad moral se atreven avocarse al Papa Francisco, son absurdas las ayudas que aveces solicitan por ejemplo esta, hace días pudieron realizar ayudas que en verdad el pueblo necesite o gestionar con otras organizaciones ayudas.
Carlos Daniel Espinal Ucles says:
Me parece ridículo que el gobierno ahora esté «pidiendo ayuda al mundo por las vacunas», si desde el año pasado rechazó múltiples tratos para poder adquirirlas incluyendo donativos, si no hubieran rechazado la ayuda de tantos países o pensar siquiera en el bienestar del pueblo y comprar las vacunas no estaríamos tan retrasados en la administración de éstas.