Honduras Solidaria ya llevó alimentos a más de 100.000 hondureños afectados por emergencia por coronavirus
Tegucigalpa. La Operación Honduras Solidaria completó hoy la entrega de alimentos en la colonia Nueva Capital, del Distrito Central, con lo cual totalizó más de 20.000 familias beneficiadas en la capital y otros dos municipios, las cuales suman más de 100.000 hondureños que están entre la población más afectada por la cuarentena para contrarrestar la propagación del coronavirus.
Unas 2.500 familias de la Nueva Capital y zonas aledañas recibieron sus Sacos Solidarios de alimentos entre el domingo y este martes, en la séptima jornada de entregas consecutivas en el Distrito Central, que comenzaron el miércoles en Los Pinos, a cargo de las Fuerzas Armadas y Guías de Familia, en coordinación con otras instituciones.
El comisionado de Abastecimiento a Regiones Afectadas, Luis Colindres, informó que “se entregaron 2.500 suministros solo en la Nueva Capital y regiones aledañas, llegando a más de 20.000 familias solo en el Distrito Central”.
“Con las entregas de hoy, estamos llegando a 100.000 mil hondureños, en el Distrito Central”, así como en los municipios de El Triunfo (Choluteca) y Santa Fe (Colón), dijo Colindres.
Operación Honduras Solidaria busca llegar a más de 800.000 familias, que representan 3,2 millones de personas, con suministros de alimentos por lo menos para 15 días, en dos entregas para sumar un mes.
Esta iniciativa del presidente Juan Orlando Hernández tiene como prioridad brindarles alimentos a las familias más afectadas por la emergencia ante la pandemia de COVID-19.
15.000 suministros para 5 ciudades
Colindres, director ejecutivo del Servicio Nacional de Emprendimiento y Pequeños Negocios (Senprende), afirmó que la operación continuará y que por eso desde hoy “se trasladan más de 15.000 suministros para las ciudades de Choluteca, Choloma, Villanueva, San Pedro Sula y La Ceiba”.
“Pedimos a la población que tenga paciencia; el incremento de las raciones de comida va a aumentarse gracias al trabajo que ha estado haciendo la Secretaría de Desarrollo Económico con Banasupro”, manifestó Colindres.
Afirmó que “se pretende hacer solo la primera entrega para las 800.000 familias en el menor tiempo posible y eso será viable solo con un trabajo de conjunto y eficaz, ahora con la suma de las alcaldías municipales en todo Honduras”.
Alacenas vacías, bendiciones del cielo
La entrega de suministros en la Nueva Capital empezó el domingo anterior y solo en el sector 3 y sectores aledaños se entregaron 2.500 sacos; de esa cantidad, uno fue para Reina Isabel Baca, casada con un fotógrafo y con quien ha procreado tres hijos.
Doña Reina mostró la alacena vacía, “debido a que mi esposo no ha podido salir a trabajar; hemos hecho caso de quedarnos en casa y ya casi no teníamos comida. Estábamos comprando pero ya teníamos poco dinero”.
“Yo estaba esperanzada porque habían dicho que la iban a traer, y lo que más me gusta es que lo que se vio que decían en la tele que iban a entregar, eso viene en el saco; estoy agradecida primero con Dios y luego con el presidente Juan Orlando”, indicó mientras acomodaba los comestibles en una alacena que ya solo contaba con un poco de harina y aceite.
Reconoció que, viviendo la crisis actual, la comida “debemos racionarla, estirarla aún más, y a los que no la han recibido, esperen en Dios que la ayuda va a llegar”.
Comprando lo que se podía
Casi enfrente de donde doña Reina viven Vilma Martínez con su esposo, un motorista del transporte urbano, quien no ha podido salir a trabajar debido al toque de queda absoluto imperante en Tegucigalpa y Comayagüela, así como en el resto del país.
“Estábamos comprando lo que se podía, porque sin trabajo y con muy poco dinero apenas ajustábamos”, dijo Martínez, quien reconoció que al trabajar y ganar a diario “se hace difícil comprar para varios días; esta (la entrsga del Saco Solidario) es una gran bendición”.
Y mientras doña Vilma acomodaba sus víveres, unas seis casas más abajo, Narcisa Paz comentó que vive sola en una casa de madera y apenas dividida en su interior por plástico y cartón, y contó que “algunos días me había acostado sin comer”, pero ya tiene alimentos de Honduras Solidaria.
Refirió que su hija vive aparte, y ella por ahora no trabaja debido al toque de queda. “Mi hija me estaba pasando un bocadito, pero ha sido difícil”, dijo casi llorando de alegría al recibir el saco de alimentos.
“Yo le doy gracias a Dios y al presidente por acordarse de nosotros los pobres; ha sido difícil esta crisis”, manifestó Paz, una señora de 67 años que pese a su sencillez vive en una casa impecablemente limpia.
Operación Honduras Solidaria también ha entregado suministros de alimentos en las colonias Los Pinos, Villanueva, Suyapa, 3 de Mayo, Nueva Capital y la aldea Guasculile, solo en el Distrito Central, y continuará tanto en la capital como en el resto del país con el apoyo de las alcaldías.