Obispo en Irak: Todos tienen miedo a una guerra
Redacción ACI Prensa
El Obispo Auxiliar de Bagdad (Irak), Mons. Shlemon Warduni, afirmó que “todos tienen miedo ante una guerra”, en relación al clima de tensión en el país originado por la muerte del general iraní Qasem Soleimani en un ataque ordenado por Estados Unidos el 2 de enero.
“Esperamos en lo que puedan hacer los jefes de estado porque todo el mundo está de cabeza. En vez de sembrar paz se siembre el odio”, dijo el Prelado iraquí a Vatican News este sábado 4 de enero.
“Todos tienen miedo a una guerra y esto sería una cosa tremenda, porque ya las familias iraquíes están dispersas en todo el mundo: tienen un hijo en un país, otros en otro, y así”, subrayó.
“Pedimos a todo el mundo que rece, que vuelva a Dios. Esto es lo más importante porque alejándose de Dios se hace todo el mal posible. Entonces les rogamos que recen por la paz”, continuó.
El Prelado explicó asimismo que la situación actual en Irak “es crítica, muy difícil. Nuestra religión es paz pero el mundo solo busca sus intereses personales, solo quiere ‘lo material’, solo quiere ocupar territorios aquí y allá”. “Es una cosa terrible y nuestros iraquíes están en grandes dificultades, sufren mucho”, añadió.
Recordando que el Papa siempre alienta la oración por la paz, el Obispo iraquí dijo que “le gritamos a todo el mundo que haga la paz, que ayude realmente a sembrar la paz sin que medien intereses personales”.
La crisis entre Irán y Estados Unidos
A fines de diciembre, un contratista de defensa estadounidense en Irak murió tras un ataque de misiles. El gobierno estadounidense responsabilizó a una milicia iraquí apoyada por Irán, y devolvió un ataque que acabó con la vida de 25 guerrilleros.
En respuesta, el 31 de diciembre de 2019 se realizó una violenta manifestación en el exterior de la embajada de Estados Unidos en Bagdad, causando daños menores a la instalación.
De acuerdo al Departamento de Defensa de Estados Unidos, la muerte de Soleimani, líder del Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos Iraníes y considerado la segunda persona más poderosa de Irán, fue una “acción defensiva para proteger a personal de Estados Unidos en el extranjero”.
“Los Estados Unidos continuarán tomando todas las acciones necesarias para proteger a nuestro pueblo y nuestros intereses en cualquier parte del mundo”, señaló el Departamento de Estado.
Por su parte, el presidente de Irán, Hassan Rouhani, aseguró que su país “tomará venganza por este crimen atroz”.
“Se elevará la bandera del General Soleimani en defensa de la integridad territorial del país y la lucha contra el terrorismo y el extremismo en la región, y el camino a la resistencia a los excesos de Estados Unidos continuará”, aseguró Rouhani en Twitter.
El Líder Supremo de Irán, Ali Khamenei, calificó a Soleimani de “mártir” y aseguró que una “venganza severa espera a los criminales que han manchado sus manos con las (de Soleimani) y la sangre de los otros mártires”.
El viernes 3 de enero, se anunció además que el gobierno de Estados Unidos envió entre 3 mil y 3500 soldados a Medio Oriente.