Olvin Matute García lucha por sus tres hijos que padecen dengue
El joven Olvin Matute García corre de un lado hacia otro en la sala de pediatría del Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, tratando de darles la atención de padre a sus tres hijos que están internos a causa de la terrible enfermedad del dengue.
En su rostro se refleja la tristeza que sale de un corazón dolido por ver en una cama y con suero a sus hijos: Olvin Gerardo, de 13 años; Wendy Neyeli (10) y Parker Javier (4).
Con su voz entrecortada, Olvin cuenta que reside en Buenos Aires, Santa Cruz de Yojoa (Cortés) y que desde el fin de semana se encuentra en San Pedro Sula con sus tres pequeños hospitalizados.
El sábado tuvo que traer al Hospital Mario Catarino Rivas a uno de sus hijos y a los otros dos los tuvo que internar el domingo, siempre a causa del dengue.
Viendo a su alrededor varias camas con menores que padecen dengue, Olvin Matute manifestó que “la historia que hoy estoy viviendo es que he tenido a mis hijos muy graves y he visto padres que han salido tristes por sus hijos, que los han perdido”.
Pidió a otros padres de familia que por favor cuiden a sus hijos para que no sean víctimas del zancudo que produce el dengue.
Contó que sus hijos ya tenían dengue cuando los llevó al centro de salud en Santa Cruz de Yojoa, pues presentaban calentura y dolor de cabeza.
Con mucha fortaleza
A pesar de que no oculta que está sufriendo, Olvin no para de luchar por regresar pronto a casa con sus tres hijos y verlos jugar como lo hacen siempre.
“Esto que estoy pasando es doloroso y no se lo deseo a nadie”, dice para luego expresar que “le pido a Dios que me los cuide, pues sin Él no somos nada”.
Olvin les dice a todos los hondureños que “hay que creer, porque esta enfermedad (dengue) mata, y es algo real que estamos viviendo”.
Contó que “al traer a mi primer hijo ya venía con la mitad de los piecitos y las manos de color blanco y en ese momento se me cruzaba por la mente que solo Dios conmigo”.
Exhortó a los demás padres a que “cuiden a sus hijos, que limpien bien los solares, mantengan las casas limpias y que sean ordenados” para prevenir la aparición de criaderos del zancudo que transmite el dengue.
Para finalizar agradeció a los médicos y enfermeras que los están atendiendo de la mejor forma y aseguró que “esta batalla la vamos a ganar por fe”.