Hondureños disfrutan en su máximo esplendor las Villas Navideñas
Las Villas Navideñas inundan de color y alegría la vida de las familias hondureñas, que todos los días durante este mes de diciembre, y hasta el 6 de enero, están disfrutando del ambiente festivo, de luces y de figuras como Santa Claus, muñecos de nieve y elfos, así como de tradiciones catrachas, que se disfrutan en dichas instalaciones.
Además, en esta iniciativa del presidente Juan Orlando Hernández resaltan los juegos para niños y las comidas tradicionales en esta temporada navideña.
Las Villas Navideñas son parte de las celebraciones de la Navidad Catracha que el mandatario hondureño impulsa desde 2014, con el objetivo de que las familias hondureñas puedan disfrutar con decenas de actividades en esta fecha tan especial de fin de año.
Asimismo, este programa presidencial brinda espacios seguros para la convivencia, que fomenten cultura de paz, unidad familiar, sana recreación, valores culturales, así como costumbres y tradiciones locales de la época navideña.
Luces, comida y diversión
“Las Villas Navideñas cada vez están mejor y esto hace que uno regrese a la infancia. Me siento genial y esta Villa Navideña me ha bajado como 20 años, he vuelto a ser niña”, dijo doña Eliana Rivera, quien consideró esta iniciativa como “espectacular y única”.
Rivera, quien visitaba la Villa Navideña instalada en el Complejo Deportivo José Simón Azcona o Villa Olímpica, de Tegucigalpa, comentó que lo que más destaca de esta iniciativa navideña “son las comidas, juegos y los Nacimientos, que son hermosos”.
Don Lester Mendoza, quien visitaba por primera vez la Villa Navideña, reconoció sentirse “sorprendido”, porque “nunca había visto tantas luces y juegos”.
“Agradecemos al presidente Hernández, porque en esta Villa hay muchas cosas hermosas. Lo que más me ha gustado es el karaoke y las comidas tradicionales”, contó Mendoza, quien fue acompañado por su esposa, doña Carmen Duarte.
“Nos hemos venido a divertir y a degustar de las comidas, porque el arte culinario hondureño es muy bueno; este es un tipo de convivencia para pasarla bien en familia. Invito a los hondureños a que visiten las Villas Navideñas”, exhortó doña Carmen Duarte.
“Aquí nos olvidamos de las tristezas”, dijo don Ulises Castellanos, quien portaba un gorro de Santa Claus.
“Aquí hay diversiones para todas las edades y lo mejor es que es gratis. Las familias tienen que venir a las Villas para que pasen un momento sano y divertido”, precisó el capitalino.
Dos millones de luces en la Villa Olímpica
Mientras tanto, Rosbin Montes, quien forma parte del equipo de trabajo de de la Villa Navideña que funciona en la Villa Olímpica, exteriorizó que “contamos con dos millones de luces”.
“Las familias hondureñas pueden degustar de los dulces de leche, torrejas, nacatamales, además contamos con manualidades y área para niños”, explicó Montes al tiempo que informó que las Villas Navideñas estarán abiertas hasta el 6 de enero.
Las Villas Navideñas no solo consisten en pasar un momento ameno con familiares, sino que también generan empleos.
Doña Lesby Salgado, quien tiene un negocio de dulces y manzanas de miel, contó que “estas Villas son una gran ayuda, gracias a Dios el negocio ha estado bueno. Ha sido una buena experiencia y es una gran oportunidad para sacar adelante nuestras familias”.
Virginia Romero, quien tiene un negocio de bisutería y se instaló desde que se abrieron los portones de la Villa Navideña, dijo que los clientes “aquí encuentra producto bueno, bonito y barato; el producto más caro que tengo es un collar de plata que vale 350 lempiras”.
“Estamos contentos con esta iniciativa; las Villas Navideñas no tienen nada que envidiar a otros países y da gusto ver felices a las familias”, finalizó diciendo la microempresaria.