BID presenta análisis de Políticas Agropecuarias en Honduras
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) presentó en Tegucigalpa el estudio “Análisis de Políticas Agropecuarias de Honduras”, que desarrolla un análisis detallado del marco de políticas públicas en el sector agropecuario en Honduras, utilizando la metodología de estimados de apoyo al productor (EAP, o PSE, por sus siglas en inglés) de la OCDE. El estudio se realizó en el marco de la iniciativa Agrimonitor del BID.
El enfoque del estudio se centra en dos elementos principales de apoyo: (i) el efecto causado por las políticas del Gobierno de Honduras en los precios recibidos por los productores agropecuarios en las cadenas principales del sector, y (ii) el apoyo proporcionado a través de transferencias presupuestarias al sector. Para esto, el análisis incluye tanto el marco de política comercial del país como sus políticas internas relacionadas con transferencias, precios, comercialización e impuestos.
El sector agropecuario es de gran importancia para la economía de Honduras; representa el 13.9% del Producto Interno Bruto (PIB) y el 35.6% del valor total de las exportaciones del país. Además, 29% de la población económicamente activa trabaja en el sector.
Para el análisis se actualizaron varios indicadores que permiten la comparación de los niveles de apoyo entre años y sub-sectores, y que podrían servir de referencia para ayudar a medir los efectos los programas, proyectos y políticas agropecuarias, y guiar reformas o cambios para los próximos años. Así mismo, el análisis permite una comparación del nivel de apoyo agrícola en Honduras con otros países de la región. El informe cubre el período 2011-2016, y es complementario a un estudio anterior realizado en 2014.
En el análisis de los indicadores se incluyó también información más detallada sobre la estructura de algunas de las cadenas de valor más importantes de Honduras (café, granos básicos). Esta información proporciona una visión más profunda de los incentivos y desincentivos que enfrentan los productores, y una indicación de si las distorsiones de precio observadas son el resultado de políticas o características específicas de la cadena de valor.
La última sección del informe presenta un conjunto de recomendaciones de políticas basadas en el análisis presentado. Las recomendaciones tienen como objetivo servir como insumos para un diálogo, basado en la evidencia, sobre posibles reformas de política para fortalecer la competitividad del sector agropecuario en Honduras y crear un ambiente más propicio para la inversión privada.
Las principales conclusiones del análisis son las siguientes:
– En el periodo 2014–2016, se observó un apoyo de las políticas públicas al sector agropecuario lo cual representó el 12.6% de los ingresos brutos de los productores.
– La principal forma de apoyo ha sido la protección a precios de mercado, sobre todo para carne de pollo.
– Las inversiones en servicios generales (investigación, sanidad, infraestructura agrícola) representan el 17.8% del apoyo total y se destinan sobre todo a infraestructura física e hídrica, e investigación.
– Si bien se apoyó a los productores, los consumidores debieron pagar precios más altos de los que pagarían en ausencia de los mecanismos de protección de los precios a los productores.
Pedro Martel, Jefe de la Division de Agricultura del BID y Carmine Paolo De Salvo, lider la iniciativa Agrimonitor, han compartido con la audiencia las siguientes recomendaciones para mejorar el marco de políticas agrícolas de Honduras:
– Reducir la participación de los apoyos vía precio y aumentar los apoyos menos distorsionantes del mercado, sobre todo en servicios generales como infraestructura de riego, caminos rurales, investigación y sanidad agropecuaria, que tienen los mejores impactos en el desempeño del sector, y que además pueden ayudar a enfrentar mejor el cambio climático.
– A nivel institucional, invertir en una mejor recopilación y montaje de las estadísticas agrícolas. Además, abordar la dispersión de datos cuantitativos entre diferentes instituciones del Gobierno, a través de la creación de una sola base de datos agro-estadísticos manejada por la UPEG, que pueda ser disponible en línea.
– Actualizar periódicamente los indicadores de apoyo para evaluar si las reformas de políticas e inversiones públicas están creando un entorno propicio para comercio e inversión en el sector y para proporcionar insumos importantes para una formulación de políticas más basada en la evidencia, que contribuya a un sector agropecuario más diversificado y competitivo en Honduras.