Ahora se debe buscar la regularización para los amparados en el TPS: Presidente Hernández
Puerto Lempira (Gracias a Dios).-El presidente Juan Orlando Hernández dijo hoy en Puerto Lempira (Gracias a Dios) que, una vez ampliado por seis meses el Estatus de Protección Temporal (TPS) para miles de hondureños en Estados Unidos, ahora se debe trabajar en un mecanismo que permita la regularización de esos compatriotas.
El mandatario abordó el tema en Puerto Lempira, lugar al que acudió con motivo de la llegada del Buque de Apoyo Logístico y de Cabotaje con asistencia médica y humanitaria para el departamento de Gracias a Dios.
Seis meses para tomar una decisión
Hernández refirió que se extendió el TPS por seis meses para tomar una decisión definitiva, aunque “es el resultado del trabajo emprendido por todos los sectores y el Gobierno de la República para presentar la solicitud”.
Recordó que otros países no lo presentaron, Honduras sí lo hizo y por eso se confirma que el Gobierno de Estados Unidos ha concedido la extensión por esos seis meses.
“Se debe esperar los seis meses siguientes para luego buscar la regulación y que los compatriotas se queden de manera definitiva en Estados Unidos, porque han trabajado duro todos estos años”, dijo Hernández.
La extensión del TPS por seis meses la anunció ayer el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos para Honduras, mientras que para Nicaragua se cancelará el referido régimen.
Más de 57,000 hondureños están amparados en el TPS, que permite a los migrantes trabajar y vivir de manera legal en ese país bajo ese régimen temporal.
La ampliación del TPS será del 5 de enero al 5 de julio de 2018, fecha en la que se tomará una decisión sobre su continuidad, mientras que los miles de hondureños beneficiados deben iniciar los respectivos trámites para renovar sus permisos de trabajo.
Hasta hoy son 439,625 mil personas de Centroamérica las que están amparadas bajo el TPS, en su mayoría salvadoreños y un poco más de 57,000 hondureños.
Estados Unidos concedió a Honduras el TPS en 1998, tras el paso del Huracán Mitch por Centroamérica, que dejó pérdidas considerables en infraestructura y vidas humanas.
El TPS permitió que los permisos de trabajo y residencia se renovaran de forma automática por 13 ocasiones, por un período de 18 meses para los miles de hondureños que forman parte del esquema.