Exigencias del FMI: Fortalecer ingresos tributarios y sanear finanzas de la ENEE
Fuente HRN
Honduras logró la firma de un entendimiento con el Fondo Monetario Internacional en diciembre de 2014 que abrió las puertas para 200 millones de dólares de dicho organismo y de 220 millones de dólares para apoyo presupuestario procedentes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Después de seis revisiones al programa económico acordado con el Fondo Monetario Internacional, dos temas se mantienen como las principales exigencias del organismo.
El primero se refiere al fortalecimiento de los ingresos tributarios y, el segundo, consiste en sanear las desequilibradas finanzas de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE).
La presión tributaria se ha incrementado progresivamente, de tal manera que para el ejercicio 2018 se ha fijado una meta en la recaudación de impuestos superior a los cien mil millones de lempiras.
Al cierre de 2017, se espera que la responsabilidad fiscal que cae sobre los contribuyentes se refleje en ingresos superiores a los 90,000 millones de lempiras.
En lo que respecta a la estatal eléctrica, sus finanzas siguen en rojo. Únicamente se han recuperado tres puntos de las pérdidas que rondan el 30 por ciento.
A julio de este año, la estatal contabilizaba un déficit acumulado superior a 51,500 millones de lempiras y deudas con los proveedores por cinco mil millones.
Por encima de estos señalamientos, el Fondo Monetario le ha otorgado calificaciones satisfactorias al desempeño de la macroeconomía en las seis revisiones efectuadas al comportamiento financiero hondureño.
En su más reciente evaluación, los técnicos internacionales destacaron las adecuadas políticas macroeconómicas impulsadas por nuestro país, así como el cumplimiento de todos los criterios de desempeño fiscal.
Los logros respaldan el mayor y más estable crecimiento económico con mejores condiciones sociales, a juicio de los personeros del Fondo Monetario que recién concluyeron su visita a Tegucigalpa.
Se espera que para finales de 2017 Honduras tenga un crecimiento económico de cuatro por ciento, superior al 3.5 por ciento que se había proyectado inicialmente.
Las remesas que el año pasado se cuantificaron en 3,900 millones han mostrado un incremento de alrededor de 13 por ciento al primer semestre de 2017.
El escenario pintado por el Gabinete Económico para el año en curso está basado en un crecimiento sostenido, un déficit de la administración central de 2.8 por ciento y un desbalance de uno por ciento en el sector público no financiero.
Se espera, igualmente, que la inversión experimente un crecimiento arriba de siete por ciento, que las exportaciones se eleven en un 3.6 por ciento y que el envío de remesas sobrepase cuatro mil millones de dólares.
Además se prevé una inflación no mayor al 4.5 por ciento, un alza de más de tres por ciento en las exportaciones y un mayor crecimiento por el aumento en la inversión pública, principalmente en la infraestructura.
Durante las revisiones que llevó a cabo la misión del Fondo Monetario en mayo y junio de este año, la institución puso de relieve la necesidad que Honduras continúe con las políticas macroeconómicas y financieras.
En los exámenes practicados en 2016 y 2015, el país también salió bien librado. Los informes del ente crediticio externo resaltaron la puesta en práctica de un programa de reformas económicas que han permitido un crecimiento incluyente, mayor cobertura de la red de protección social y la construcción de los cimientos de la sostenibilidad fiscal.
Honduras logró la firma de un entendimiento con el Fondo Monetario Internacional en diciembre de 2014 que abrió las puertas para 200 millones de dólares de dicho organismo y de 220 millones de dólares para apoyo presupuestario procedentes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Fuente HRN