Sector obrero espera que empresarios sean flexibles en su posición con respecto al aumento salarial
“La posición se puso complicada de parte del sector empresarial y el gobierno mismo porque ellos están hablando de un 3.4 de inflación cuando sabemos que los costos de la canasta básica semanalmente se siguen disparando casi no ha habido ninguna rebaja en los productos de consumo popular, las carnes, los granos que son lo que más consumen nuestra población” señaló este día, Alberto Taibol miembro de la Comisión de negociación de la Central General de Trabajadores.
“Por lo tanto miramos un poco difícil que vaya a existir un punto donde podamos firmar y acordar un aumento que venga a justificar la inflación que ha estado sufriendo la clase trabajadora hondureña, nosotros pensamos que diferido un aumento de cierta cantidad se podría arreglar, pero habría que ver la voluntad y disposición que puede tener tanto el sector privado como el gobierno”, explicó.
Taibol manifestó que en los últimos años el gobierno se ha involucrado en las cosas de los empresarios, por lo que ambos están vinculados y por lo tanto es un poco difícil llegar a un acuerdo en buena relaciones, entendiéndose que se debe negociar por un periodo más largo, no de un año para no gastar a las partes porque al final de una negociación se sataniza la participación de parte del sector trabajador.
“Cuando no somos nosotros los que autorizamos los aumentos ni damos el dinero, el dinero lo tiene el empresario, quienes lo producimos somos nosotros, pero en definitiva quien tiene la capacidad de de decir que porcentaje dignamente le puede dar al trabajador son los mismos empresarios que son los que tienen el capital, el trabajador solo vende su fuerza de trabajo”.
Agregó que, “por lo tanto pedimos a la población que este consiente porque estamos en una situación bastante difícil porque la economía mundial esta contraída y en nosotros no es la excepción, en los últimos años la empresa privada ha tenido una actitud un poco dispuesta al dialogo, no están tan cerrados en no aceptar cualquier posición que podríamos poner en la mesa, lo complicado va a ser la decisión del porcentaje que se va a tener al final, la actitud del empresario”.
“Esperamos que los porcentajes que podríamos llegar a un acuerdo si fuera un 6, 7 u 8 por ciento, se pudiera llegar en buenas relaciones y así mejorar las condiciones económicas de la clase trabajadora” finalizó.