La situación de agua en los embalses de la capital se empeora cada vez más
La delicada situación de los embalses de la capital es cada vez más crítica, si para Junio no ha llovido, la represa los laureles prácticamente quedaría vacía, explicó el gerente de la Unidad Metropolitana del Servicio Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), Carlos Hernández.
“Es una situación que se presenta todos los años en esta época al finalizar el verano, entrando el invierno, Laureles se recupera fácilmente con las primeras lluvias, normalmente son a finales de mayo y meteorología nos ha confirmado esto”, expresó el ingeniero Hernández.
Según la planificación que SANAA hace, en los embalses que abastecen de agua la capital, si no lloviera, existe liquido hasta la primera quincena de Julio, después ya no habría agua que extraer.
“Todo aparenta que ya se terminó el fenómeno del niño, ya comenzó a llover un poco, en otras regiones del país, siendo así mejoraremos ya los servicios en junio”, siguió comentando Hernández.
En el área del picacho y todo oriente de la ciudad se está distribuyendo agua cada cinco días, debido a la poca producción de agua que existe en el lugar, de mil litros por segundo que se produce en invierno, ahora solo se produce 350 y se empeora más debido a que no existe ningún tipo de almacenamiento.
Laureles y Concepción que abastecen el 75 por ciento de la ciudad, envían agua a las colonias cada tres días, según el ingeniero, se tienen 16 millones de metros cúbicos de 46 que abarca en su totalidad, en pocas palabras hay un 35 por ciento de agua, pero si laureles baja mucho en estos días, se va tener que hacer racionamientos más drásticos a partir de la segunda quincena de mayo.