Clásico a todo pulmón
España.- Pocas certezas y numerosas dudas presiden el gran partido del fútbol español. De las certezas se ocupa el Barça, que encabeza la Liga y ha salido airoso de lo que se suponía un periodo traumático, el de la ausencia de Messi, su jugador bandera. Las dudas corresponden mayoritariamente al Real Madrid, situado tres puntos por detrás del Barça, con un juego decepcionante frente al París Saint Germain y el Sevilla, envuelto en críticas y sometido a una enorme exigencia: una derrota situaría a Rafa Benítez en una situación muy delicada.
Como siempre, este partido rompe todas las costuras del fútbol y adquiere una trascendencia incomparable. Ningún otro duelo genera tanta expectación en el mundo. Esta consideración, al margen de lo puramente futbolístico, tiene mucho que ver en las extraordinarias medidas de seguridad que se establecerán en el Bernabéu y sus alrededores. Los atentados de París, y muy singularmente el episodio que acabó con la muerte de dos terroristas en los accesos al estadio de Saint Denis, presiden el ambiente previo al clásico español.
Doble reagrupamiento
El partido tiene el aire de un gran reagrupamiento. Asolados por las lesiones desde el comienzo de la temporada, los dos equipos recuperan a la mayoría de sus jugadores, Messi incluido. El Real Madrid contará con Carvajal, Marcelo y Benzema, tres futbolistas imprescindibles en su actual estructura. Ninguno de sus sustitutos se ha acercado al nivel de ellos. Nadie ha defraudado más que Danilo. No se sabe si sufre un problema de adaptación, de timidez o de calidad.
Al técnico blanco se le mirará con lupa en su primer Clásico
El problema para todos los que regresan de las lesiones es que el encuentro no admite medias tintas. La exigencia del Madrid-Barça requiere máxima fortaleza física y mental. Es bien sabido que cualquier concesión de un jugador, o de un equipo, la aprovechará el rival. Si todo es como parece, volverán Benzema, indispensable para unir las piezas de un equipo que ahora mismo es un mosaico sin resolver, y James, empeñado en enviar dardos a Benítez. El colombiano está hecho a la medida de esta clase de grandes partidos.
Las dudas en el Real Madrid se concentran en la configuración del medio campo, donde Casemiro ha sido insustituible en los últimos partidos. Tiene todo el aprecio de Benítez. El joven jugador brasileño ha respondido con nota a las instrucciones del técnico. Sin embargo, al juego del Madrid le ha faltado vuelo, expresividad, la exuberancia que generalmente acredita al equipo. Kroos, capitán general en la temporada anterior, ahora tiene un papel secundario. No transmite la sensación de plenitud.
¿Casemiro o Kroos en el vértice del medio campo? Si se produce el regreso de Benzema, esta elección se antoja casi segura. Hace un año, Kroos, Modric, Isco y James se impusieron con rotundidad a Iniesta, Xavi y Busquets. La superioridad fue de tal calibre que se llegó a proclamar el final de la gran dinastía de centrocampistas del Barça. La realidad fue muy diferente en la segunda vuelta del campeonato.
Benítez, bajo lupa
A Benítez se le mirará con lupa en su primer Clásico como entrenador del Real Madrid. La hinchada madridista se mantiene expectante, a la espera de la decisión sobre el nuevo técnico del equipo. Por ahora, hay más sombras que luces, pero también es cierto que las bajas en la plantilla blanca han sido tan numerosas que apenas ha habido continuidad en las alineaciones. En cualquier caso, las urgencias comienzan a pesar sobre el entrenador.
El Barça está en posición de dar un golpazo a la clasificación
El Real Madrid no se puede permitir una derrota frente al Barça. Se abriría algo más grande que una distancia de seis puntos en la tabla. Sería una invitación a la crisis en toda regla.
El Barça llega sin apremio y está en la situación perfecta para dar un golpazo en la clasificación. Nadie lo esperaba después del irregular comienzo en el campeonato, y mucho menos tras la lesión de Messi. Las impresionantes actuaciones de Neymar y Luis Suárez han revertido los pronósticos. Pocas veces se ha visto en el fútbol una conexión tan perfecta. Han marcado 20 de los 23 goles que ha anotado el Barça desde la lesión de Messi frente a Las Palmas. Una combinación simplemente letal.
Sin embargo, el impacto de Neymar y Luis Suárez no ha escondido algunos problemas defensivos del equipo, que ahora mismo no controla los partidos como en los mejores tiempos del Barça. Como en la segunda parte de la temporada anterior, por ejemplo. Se sabe que vuelve Messi, pero no se conoce si lo hará como titular o figurará entre los suplentes, como sucedió en el Manzanares hace tan sólo tres meses.
No se descarta un 4-4-2 si Messi no sale en el equipo inicial. Ni Munir ni Sandro han dado hasta ahora las garantías suficientes y el Bernabéu es un escenario que siempre impone. Si Messi es titular, el 4-3-3 es innegociable para Luis Enrique. No son incertidumbres cualquiera, pero menores en cualquier caso con respecto a las que afectan al Real Madrid en las vísperas del clasicazo español.
El partido es hoy a las 11:00 de la mañana, hora de Honduras
Fuente: MARCA.com
