Joe Biden no será precandidato demócrata a la presidencia de los Estados Unidos
El vicepresidente anunció finalmente que no disputará la interna contra Hillary Clinton. Alegó que tras la muerte de su hijo no se siente en condiciones de afrontar una campaña electoral
«La campaña no tiene en cuenta otros factores familiares. Ya se pasó el tiempo prudente. Mi familia tuvo una pérdida muy profunda. En ese lugar están los Biden hoy. Creo que se acabó el tiempo necesario para una campaña ganadora», dijo Biden desde la Casa Blanca, haciendo referencia a la muerte de su hijo Beau Biden, el 30 de mayo de 2015.
Beau tenía entonces 46 años y murió víctima de un cáncer cerebral, lo que fue un duro golpe para Joe Biden. Tanto que terminó por convencerlo de que no estaba a la altura de las presiones de una campaña por la presidencia.
Biden habló desde los jardines de la Casa Blanca acompañado por su esposa Jill Biden y el presidente Barack Obama. «Creo que nos quedamos sin tiempo, el tiempo necesario para montar una campaña ganadora por la nominación» del candidato demócrata a la presidencia, dijo aseguró el vicepresidente.
Tras dar sus motivos, Biden utilizó su discurso para difundir un mensaje de apoyo al primer mandatario. «Los demócratas no deben solo defender el trabajo del presidente Obama, deben lanzarse y prometer continuar con su labor», agregó.
«Hay mucho que el presidente deberá hacer. Estaremos construyendo sobre bases muy solidas. Todo comienza con ayudar a la clase media», dijo.
El vicepresidente norteamericano también reveló sus planes de trabajar en la lucha contra el cáncer. «Quisiera ser el que terminó con el cáncer», sostuvo.
«La desigualdad es una amenaza directa a la democracia», agregó el número dos del gobierno.
«Que todas las personas tengan dignidad no es complicado. El ciudadanos de a pie de EEUU cree en las posibilidades ilimitadas. Cualquier persona puede llegar a ser lo que quiera», dijo, «optimista de las posibilidades de avanzar».
«No hay una mejor nación que los Estados Unidos para liderar el mundo. Washington tiene que ser parte de la solución, no del problema», afirmó.
Biden ya había adelantado el lunes 19 de octubre, en forma no oficial, que se tomaría 48 horas para tomar una decisión sobre su eventual candidatura.
Su decisión ha sido una buena noticia para la favorita precandidata favorita del partido Demócrata, Hillary Clinton. Lo cierto es que .Hillary intentó por todos los medios evitar que el vicepresidente entrara en la carrera debido a que sus chances se verían reducidas.
En cambio, las posibilidades de Bernie Sanders, el precandidato sopresa de la campaña, probablemente habrían subido, porque los votos de Biden y de la ex primera dama –con simpatizantes similares– se habrían repartido.
El senador demócrata Dick Durbin sostuvo que, aunque hubiese entrado en la carrera presidencial, «no está seguro» de que el vicepresidente hubiese ganado la nominación.
«En este momento, no tiene la estructura partidaria que tiene Hillary», explicó Durbin. «Clinton es la candidata a presidente más fuerte», concluyó Durbin.
Tomado de Infobae