Japón y AMDC inauguran obras de mitigación en cerro “El Berrinche”
• “Es la obra más importante de mi administración, pude construir 5 pasos a desnivel, pero este proyecto se trata de salvar vidas y eso no tiene precio”, alcalde Ricardo Álvarez.
La Alcaldía Municipal del Distrito Central y el gobierno de Japón, a través de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (Jica), inauguraron hoy las obras de mitigación en la falla geológica de El Berrinche, las cuales están comprendidas en el Proyecto “Prevención contra Deslizamientos de Tierra en el área Metropolitana de Tegucigalpa”.
En los actos estuvieron presentes el presidente de la República, Porfirio Lobo Sosa, el alcalde del Distrito Central, Ricardo Alvarez, el embajador de Japón en Honduras, Shisei Kaku, el director de Jica, Masayuki Takahashi y representantes de la empresa Hazama Corporation encargados de ejecutar los trabajos, entre otras personas involucradas con el proyecto de mitigación.
En la inauguración de este gran proyecto único en Honduras y Latinoamérica, el alcalde de la ciudad, Ricardo Álvarez se mostró satisfecho de poder inaugurar lo que calificó como la obra más importante de su administración edilicia.
Este proyecto, junto al que se ejecuta en el cerro El Reparto, tiene un costo de 13 millones de dólares (870 millones de Yenes, equivalentes a 260 millones de lempiras), suma con la que se hubiesen construido cinco pasos a desnivel o 100 kilómetros de calles pavimentadas sin embargo, se trata de proteger a los más pobres y ser solidarios con programas que ayuden a los más necesitados, agregó el alcalde.
“Me siento orgulloso de ser parte de este sueño y de un equipo que con perseverancia ha demostrado que en Honduras sí se pueden hacer las cosas y ahora se está dejando una ciudad más segura, especialmente en beneficio de los más pobres”.
Recordó que desde que inició su gestión municipal empezó a tocar puertas para realizar este proyecto que viene a dar seguridad al pueblo capitalino, en ese momento fue el pueblo y gobierno de Japón que abrió las puertas para ejecutar esta obra, por lo que agradeció el esfuerzo y la solidaridad de esa nación que ha acompañado a Honduras en los momentos que más lo ha necesitado.
Ricardo Álvarez alabó que el gobierno Nipón es solidario con Honduras para prever las desgracias que podrían darse, “y eso nunca lo vamos a olvidar, gracias Japón por esta gran obra que es la primera que se hace fuera de Japón”.
Una obra profundamente humana
Mientras tanto, el presidente de la República, Porfirio Lobo Sosa, destacó el enorme beneficio que trae este proyecto para el pueblo capitalino, es por eso que “alcalde Álvarez, yo lo felicito sinceramente, porque esta es una obra profundamente humana, recordemos el sufrimiento de nuestro pueblo durante el huracán Mitch, porque esta tierra y lo vimos en unas tormentas que hubieron el 2010, el deslizamiento y la fragilidad era terrible”.
Sin embargo, ya con esta obra sabemos que estamos protegidos, que no se hará ninguna represa sobre el río Choluteca que vaya a provocar inundaciones, pérdida de vidas humanas que es lo más sagrado y destrucción de lo material.
El mandatario hondureño agradeció al pueblo y gobierno de Japón por ayudar a mitigar desastres en Honduras y pidió al equipo conformado por la alcaldía que estará encargado del cuidado y mantenimiento de la obra, que cuide bien este gran trabajo ejecutado por Japón.
Solidaridad de Japón
Luego de recibir un reconcomiendo de parte del pueblo y gobierno municipal, el embajador de Japón, Shisei Kaku, dijo que hoy es un gran día porque se marca una nueva ruta para su país, que está contribuyendo a la paz y tranquilidad de la comunidad internacional.
Es un honor inaugurar en nombre del gobierno de Japón una obra civil de tal naturaleza para prevenir desastres en Tegucigalpa, ciudad que es prioritaria para la cooperación financiera y técnica nipona, agregó el diplomático, quien refirió que los cerros El Berrinche y El Reparto eran zonas de alta probabilidad de deslizamientos, lo cual significaba un gran riesgo para la población.
El embajador agradeció al alcalde Ricardo Alvarez por haber permitido la construcción de este proyecto que a partir de este momento estará bajo el mando de la comuna capitalina, la que realizará la supervisión y el cuidado permanente de la zona, donde se empezaron a sembrar árboles denominados Cerezo Japonés que por primera vez se plantan en Centroamérica y simbolizan la contribución, solidaridad y el apoyo de Japón.
Entre tanto, el representante de Jica en Honduras, Masayuki Takahashi, manifestó su satisfacción de tan importante proyecto, que fue ejecutado con la cooperación no reembolsable del gobierno de Japón.
La prevención y mitigación, es una de las prioridades para la Cooperación Japonesa, es por ello que JICA, continuará asistiendo en la prevención de desastres naturales, para crear una Honduras resiliente ante los efectos nocivos del cambio climático, siguiendo el mismo concepto de “adoptar y adaptar”, obras de mitigación como las que se han construido aquí en El Berrinche, expresó el representante de Jica.
“Quiero felicitar al equipo técnico de la Alcaldía, por su disposición, compromiso y dedicación al proyecto, ya que a pesar de los diferentes retos, se ha logrado resultados mayores a los esperados. Esperamos que continúen con esta misma dinámica para el seguimiento y sostenibilidad de estas obras”, finalizó el director de Jica.
Especificaciones del proyecto
Las obras de mitigación tanto en “El Berrinche” como en “El Reparto” fueron construidas con un monto valorado en 870 millones de Yenes (aproximadamente 180 millones de lempiras). Los trabajos en El Reparto serán inaugurados en septiembre próximo.
Los trabajos en El Berrinche, donde inicialmente se removieron 750 mil metros cúbicos de sedimento, consisten en la construcción de ocho pozos de inspección para succionar las aguas subterráneas a fin de estabilizar el suelo y evitar deslizamientos de tierra y rocas que podrían crear un dique en el río Choluteca.
Además contempla la construcción de los canales subterráneos que conectan a los ocho pozos para que las aguas desemboquen en el río Choluteca y el levantamiento de un terraplén que servirá de soporte ante posibles movimientos de tierra y funcionará como un campo de fútbol para los vecinos del sector.
Tanto en el Berrinche y el Reparto se instalaron sistemas de vigilancia como ser inclinómetros, piezómetros, pluviómetros y extensómetros para tener un monitoreo permanente de la saturación del suelo.