En últimos 26 meses alrededor de 467 víctimas han dejado como saldo 80 masacres
Al menos, 467 víctimas han dejado como saldo las 80 masacres impunes, de 4 o más personas muertas violentamente en cada escena del crimen, registradas en el país en los últimos 26 meses, revela un informe divulgado por el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH).
El informe del ente estatal establece que de las 467 víctimas reportadas durante los últimos 26 meses 391 murieron y 76 resultaron heridas.
De acuerdo a los registros del CONADEH, desde el 2003 a la fecha se reportó un promedio de 3 masacres mensuales, de cuatro o más personas muertas violentamente en cada hecho criminal.
A lo anterior se agrega, que como resultado de este tipo de eventos múltiples se registró un promedio de 18 víctimas mensuales de los cuales, 15 murieron y 3 resultaron heridas.
Víctimas de masacres van en ascenso
Mientras, en el 2013, el CONADEH registraba 36 masacres, de 4 o más víctimas, que dejaron como saldo 180 personas muertes y 29 heridas, en el 2014, las muertes múltiples, con esas características, ascendieron a 41, en las que perdieron la vida violentamente 197 y otras 39 resultaron heridas.
En lo que va del 2015, se han reportado 3 masacres con un saldo de 14 muertos y 3 heridos. Una registrada en la Centro América Oeste, otra en la colonia Torocagua, ambas de Comayaguela, Francisco Morazán y una en Olanchito Yoro donde murieron 4 personas.
El informe revela que en los últimos 26 meses se cometieron 40 masacres donde perdieron la vida, al menos, 4 personas en cada hecho sangriento. También se registraron 27 masacres de 5 víctimas; 8 masacres de 6 víctimas; 1 masacre de 7 victimas; 2 masacres de 8 víctimas y 1 masacre de 16 personas.
14 departamentos escenarios de masacres
El documento del CONADEH revela que las 80 masacres tuvieron como escenario 14 de los 18 departamentos del país.
El 73% de las muertes múltiples se registraron en 4 departamentos con un saldo de, al menos, 280 muertos.
En el departamento de Cortés se reportaron 30 masacres en las que perdieron la vida 149 personas, Francisco Morazán también fue escenario 16 hechos sangrientos que dejaron como saldo 72 muertos.
En Atlántida se cometieron 7 muertes múltiples en las que murieron 34 personas, en el caso de Colón y Yoro se registraron 5 masacres.
Otros departamentos escenarios de masacres fueron Comayagua y Santa Bárbara que reportaron 4; Olancho, Gracias a Dios y Copán, con 2 masacres y El Paraíso, Ocotepeque, Lempira e Islas de la Bahía con 1.
Armas de fuego presentes en el 95% de las masacres
El documento del CONADEH establece que en 76 masacres, que representan el 95%, los victimarios usaron armas de fuego de diferentes calibres para ejecutar a las víctimas.
A lo anterior se añade que, en dos casos los ejecutores usaron arma blanca, en una combinaron el uso de arma blanca y armas de fuego y en otro caso las víctimas fueron estranguladas.
Victimarios se cubren el rostro y utilizan la oscuridad de la noche para cometer crímenes
Del análisis se desprende que las personas responsables de cometer este tipo de hechos violentos contra la vida pocas veces son reconocidas por las autoridades encargadas de mantener el orden en el país.
Según el informe, en muchos de los casos, los victimarios utilizan uniformes similares a los que portan los miembros de la policía, se cubren el rostro con pasamontañas, usan chalecos antibalas, portan armas de grueso calibre y actúan en la oscuridad de la noche.
Añade que en ocasiones se conducen en motocicleta, otras veces en camionetas o vehículos tipo turismo y hasta a pie para ultimar a sus víctimas.
Actúan sin mediar palabra por lo que no se descarta que haya casos donde el objetivo sea una persona y al final terminan ejecutando a personas inocentes, según se detalla en el documento.
La impunidad “gobierna” en las masacres
Uno de los hallazgos que arroja este informe es que casi en su totalidad los hechos sangrientos registrados entre el 2013 y lo que va del 2015 se encuentran en la impunidad, situación que “alimenta” que los hechos se repitan continuamente.
La impunidad es motivo de preocupación para el CONADEH, si se toma en cuenta que el Estado no tiene la adecuada investigación para determinar la autoría directa o indirecta de esas masacres y se sigue en la incertidumbre de ver caer a más personas asesinadas.
“Consideramos que la entrada e invitación para que el delincuente continúe cometiendo este tipo de hechos sangrientos es la impunidad, misma que empieza cuando un delito no es debidamente investigado por el órgano competente”, establece el informe.
Añade que la impunidad es una manera de estimular la comisión de delitos, porque si el delincuente sabe que existen pocas probabilidades de que se le castigue y se le juzgue adecuadamente, prácticamente es como que tenga “luz verde” para seguir delinquiendo sin el menor riesgo posible.
En al menos 3 casos se condenó a los responsables
En la lucha contra la impunidad, en el 2013, los tribunales de justicia condenaron a las personas implicadas en dos casos de muertes múltiples, una que se cometió en una canchita de futbol, en marzo del 2011, donde murieron 4 personas y otra en agosto del 2013, donde fueron acribilladas 17 personas en una zapatería.
El 29 de abril de 2013, un tribunal de San Pedro Sula encontró culpable a dos individuos por el asesinato cometido en una cancha de futbol, ubicado en la colonia Jardines del Valle, donde murieron de cuatro personas, el hecho ocurrido el 02 de marzo de 2011.
El 09 de agosto de 2013, el Tribunal de Sentencia de San Pedro Sula declaró culpables a tres indiciados por el asesinato de 17 trabajadores de la Zapatería Christopher ubicada en la colonia San Francisco, entre los barrios Cabañas y las Palmas de San Pedro Sula, por los delitos de asociación ilícita y asesinato en su grado de ejecución de tentativa. La masacre fue cometida en septiembre de 2010.
El 16 de octubre de 2014, un Tribunal de Sentencia con Jurisdicción Nacional, por mayoría de votos, declaró culpable a un miembro de la mara 18, quien junto a varios pandilleros le dieron muerte a 5 personas. El hecho sangriento ocurrió el 20 de diciembre de 2012 en la colonia El Reparto de San Pedro Sula