Mitt Romney anunció que no se postulará como presidente en 2015
Mitt Romney no volverá a luchar por la nominación del Partido Republicano a las presidenciales de 2016. «Después de pensar mucho otro intento para ser presidente, he decidido que lo mejor es que otros líderes del partido tengan la oportunidad de ser el próximo nominado», afirmó Romney, en un comunicado en el que zanja las especulaciones sobre su futuro político.
El anuncio sorprende a la mayor parte de los analistas, que daban por segura su candidatura desde que hace un par de semanas comentase que estaba explorando dicha posibilidad.
El ex gobernador de Massachusetts, que sufrió una dolorosa derrota en 2012 ante el demócrata Barack Obama, siempre tuvo como objetivo llegar la Casa Blanca, una idea que comenzó a germinar en su mente desde que siendo apenas un joven ambicioso viese cómo su padre, George Romney, se veía obligado a retirar su candidatura en 1968 ante la mayor fortaleza de Richard Nixon y Nelson Rockefeller.
La decisión de Romney supone un problema menos para el ala centrista del partido porque ya no competirá directamente con el ex gobernador de Florida, hijo y hermano de presidentes, Jeb Bush, que ya prepara su campaña.
La cuestión es saber si realmente Romney tenía posibilidades. Por un lado, contaba con una considerable base de donantes millonarios en Nueva York y New Jersey, lo que podría haber sido un problema para Bush y también para el gobernador de ese último estado, Chris Christie, que también está a punto de presentarse.
De hecho, hay 30 potenciales candidatos republicanos, a pesar del esfuerzo de los donantes de reducir su número y evitar otro show como el de 2012, cuando las primarias se eternizaron y se convirtieron en un circo mediático.
Por el lado demócrata, todos dan por hecho que solo va a haber una persona: Hillary Clinton.