Presidente del Congreso Nacional: “Es injusto que Estados Unidos no permita potenciar aeronaves hondureñas”
Tegucigalpa – El presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, manifestó este martes que es injusto que Estados Unidos no permita a Honduras repotenciar sus aeronaves para el combate al narcotráfico, una de las principales preocupaciones del gobierno.
En declaraciones a la radioemisora HRN, Oliva señaló que la problemática del narcotráfico y la delincuencia organizada ha sido tema de constante debate en el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, lo que se ha planteado a funcionarios Estados Unidos, incluso el subsecretario de Estado para Asuntos de Narcóticos y Seguridad, William Brownfield y representantes de la embajada de ese país en Tegucigalpa.
“Es un tema que ya está claro, que el gobierno de Estados Unidos y sus funcionarios tienen la obligación ineludible de respetar sus leyes y nosotros hacer acopio de nuestra legislación soberana”, destacó.
Admitió que la Ley de Protección de la Soberanía del Espacio Aéreo, que autoriza el derribo de aeronaves que podrían traer drogas al país, generó alguna controversia, pero aclaró que para llegar a ese extremo, se tiene que seguir un protocolo ya que se trata de un campo de exclusión aérea donde los aviones deben volar a cierta altura y velocidad de crucero.
Con antecedentes de un caso que sucedió en Perú, el Congreso de Estados Unidos legisló para que ese tipo de situaciones no se apoyasen como gobierno y eso se debe respetar y eso se le dijo al señor Brownfield cuando visitó Honduras, indicó.
Sobre la reunión que sostuvo en Washington con el encargado de Asuntos Centroamericanos y el Caribe del Departamento de Estado, Scott Hamilton, reveló que “él me insinúo en el sentido de que no sólo no nos iban a prestar ese tipo de ayuda, sino que iban a exigir que países a los cuales les han vendido esa tecnología y que nos podían ayudar, como el caso de Taiwán, había la posibilidad que interviniesen porque no podían permitirlo.”
Añadió que “esa posibilidad, no la considero correcta, como se lo expresé teniendo de testigo al embajador de Honduras en Washington, Jorge Milla y los diputados José Tomás Zambrano y Óscar Álvarez que me acomparon”.
“En ese momento le reiteré que respetamos las decisiones soberanas de Estados Unidos y sus leyes y que obviamente los funcionarios están obligados a cumplir, pero consideraba que vedarle a otros países amigos que nos diesen la oportunidad de repotenciar los aviones, me parecía que no era del todo justo”.
Sin embargo y a final de cuentas, es el presidente Juan Orlando Hernández, que por disposición constitucional rige la política exterior del país quien debe dejar de una vez por todas qué tipo de relación habrá entre ambos gobiernos, acotó Oliva.
En cuanto a la última visita del jefe del Comando Sur de Estados Unidos, general John Kelly, dijo que éste mantiene una posición coherente con la legislación de su país y ha dicho que dentro de los alcances que la ley le permite, seguirá colaborando.
Añadió que Kelly manifestó que el escudo marítimo que han instaurado Colombia, Venezuela y Honduras funciona tan bien que actualmente ha disminuido de forma sustancial el tráfico de drogas, ya que el 80 por ciento del trasiego de estupefacientes de hacía por mar y ahora ha bajado en forma considerable ya que solo la disuasión del derribo aviones con drogas ha incidido de igual forma.
El titular del Legislativo admitió que todavía estén pasando algunas naves, pero se debe a que el país aún no está tecnológicamente capacitado para detectarlo, en vista que el radar con el que se cuenta es de poca cobertura y falta además potenciar los aviones.
“Esa es la preocupación que tenemos, pero en el marco de sus competencias, el general Kelly se ha mostrado como un amigo sincero de Honduras, nos ha dado apoyo y nos lo reiteró, porque está consciente de los avances y el reconoce que ningún país en Latinoamérica ha tenido tantos avances en tan poco tiempo y con magros recursos”, apuntó.
Por otro lado, aseveró que la elaboración de un nuevo Código Penal, ha tenido una buena receptividad a nivel nacional y de la cooperación internacional con la que con su colaboración se contrató a un catedrático de la Universidad de Valencia, España y el aporte local a través de la facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) el Ministerio Público y la Corte Suprema de Justicia (CSJ),
Indicó que esas personas ya comenzaron a organizar el esqueleto del nuevo código, actualizado, en consonancia con la legislación internacional, incluso su terminología y una vez concluido ese proceso, junto con una comisión de notables del Congreso, que son quienes tendrán acceso en primera instancia al anteproyecto, socializarlo con los sectores vinculados en todo el país.
Apuntó que esperan al retorno del receso legislativo, en un mes, para tener un adelanto sustancial que permita conformar un anteproyecto consensuado y a fines de año tener un nuevo Código Penal.
Reiteró que se trata de un nuevo código y no reformas dado que el actual tiene 34 años de vigencia y ahora hay delitos electrónicos que no contempla y hay que ponerse al día con la actividad delictiva que es tan mutante, para el caso, no contempla el delito tentativa de secuestro.
Recordó que en el gobierno pasado se eliminaron las medidas sustitutivas a quienes poseyeran armas de alto poder y eso se debe aplicar así como la figura de la conciliación, que son aspectos a contemplar en el Código Penal porque de alguna manera inciden de forma directa en las causas de muerte en el país.
Oliva manifestó que percibe que existe en la Cámara Legislativa, un ambiente positivo, aunque es obvio que una legislación de ese tipo genere un amplio debate, pero al final de cuentas, se debe ver el lado positivo, porque en la medida en que se discuta y analice se va lograr un mejor producto.