En los primeros 5 meses del 2014: 48 víctimas dejan como saldo 30 hechos sangrientos registrados en buses
Al menos 48 víctimas entre pasajeros, conductores y ayudantes de buses fue el saldo que dejaron los 30 hechos violentos registrados en las unidades de buses en los primeros cinco meses del 2014 revela un informe divulgado por el estatal Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH).
De acuerdo al informe, los hechos violentos registrados en los buses dejaron como saldo 33 personas muertas violentamente mientras que otras 15 resultaron gravemente heridas.
Entre los muertos figuran 9 conductores de bus, 5 ayudantes, 2 despachadores, 16 pasajeros y un empresario del transporte.
De los 15 heridos, 12 iban en las unidades como pasajeros, dos conductores y un ayudante o cobrador.
El informe del CONADEH establece que de los 30 hechos sangrientos 13 se registraron en el departamento de Francisco Morazán, 14 en Cortés, 1 en Copán, 1 en Atlántida y 1 en Colón.
Añade el documento que entre los barrios y colonias de Comayagüela que fueron escenario de hechos violentos en los buses están las colonias La Pradera, Las Torres, así como la cuarta avenida.
También se reportaron casos violentos en el bulevar Comunidad Económica Europea, el bulevar Fuerzas Armadas, la salida a la carretera de Olancho, el Mercado Zonal Belén y las en las colonias Villanueva y la Humuya.
En lo que respecta al departamento de Cortés, los 14 hecho violentos se registraron en la colonia Sabillón, en varios sectores de Chamelecón, el barrio Concepción y a pocos metros de la Gran Central Metropolitana.
También fueron escenario de hechos violentos Villanueva, las inmediaciones del Estadio Olímpico, la colonia Palmira, Cofradía, San José V y el barrio Medina, entre otros.
El CONADEH registra el hecho violento ocurrido el 24 de marzo de 2014 en el kilometro 4 de la carretera que de Tegucigalpa conduce a Olancho, luego que la unidad del transporte que cubre la ruta Cerro Grande – Villanueva fue incendiada con el conductor en el interior del mismo.
La unidad era conducida por José Luis Vásquez y fue atacado a balazos por desconocidos cuando se encontraba en el interior de la unidad.
Posteriormente los malvivientes le rociaron gasolina y le prendieron fuego con el conductor adentro. El vehículo quedó calcinado. El conductor quedó carbonizado sobre el asiento del bus que manejaba