Presentan análisis sobre ejecución de préstamos otorgados por el BCIE a Honduras
• En 2020 y 2022 se registró aumento significativo de desembolsos del BCIE al gobierno de Honduras.
• El 47.5% de los préstamos suscritos en 2023 fueron con BCIE por USD 767 millones.
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), en su compromiso de monitorear la ejecución de recursos públicos para garantizar la transparencia y la correcta administración de fondos en beneficio de los más vulnerables, presentó este jueves un exhaustivo análisis sobre la gestión y ejecución de los préstamos concedidos por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) entre 2013 y 2023.
Dicho análisis se basa en los hallazgos de la investigación periodística realizada por el Organized Crime and Corruption Reporting Project (OCCRP), en los cuales se identificaron debilidades en la gestión del BCIE en el otorgamiento de préstamos de inversión, préstamos destinados a financiar políticas públicas, financiamientos a proyectos con impactos ambientales y sociales negativos, así como prácticas de nepotismo en esa institución financiera
multilateral.
El foro realizado hoy contó con la participación de Julio Raudales, economista y sociólogo, especialista en políticas públicas; Martín Barahona, economista y catedrático universitario, y Liliam Rivera, especialista en Finanzas Públicas de ASJ, quienes abordaron las debilidades identificadas y soluciones a las mismas.
Los datos indican que Costa Rica, El Salvador y Nicaragua fueron los países que más aprobaciones de préstamos recibieron del BCIE entre 2013 y 2023, mientras El Salvador y Costa Rica son los países que más desembolsos recibieron en el mismo período.
En el caso de Honduras, entre 2019 y 2023, el 32 % del presupuesto de la Administración Central se financió mediante endeudamiento, siendo el BCIE el tercer mayor financiador del gobierno hondureño en los últimos diez años. No obstante, en los últimos cinco años, sólo el 65 % del presupuesto asignado con recursos del BCIE fue ejecutado por el gobierno hondureño.
Entre las flaquezas identificadas figura la falta de debida diligencia en el proceso de otorgamiento de préstamos, lo cual ha permitido que fondos destinados a financiar políticas públicas se administren sin la rigurosidad necesaria, así como serias deficiencias en la transparencia de las operaciones BCIE.
Cabe señalar que varios proyectos financiados por el BCIE han tenido consecuencias ambientales y sociales negativas, por lo que se enfatizó en la necesidad de mejorar los mecanismos de evaluación y mitigación de estos impactos.
Por lo anterior, ASJ emitió recomendaciones orientadas a mejorar los mecanismos de socialización de los proyectos con impactos ambientales y sociales en las comunidades e implementar sistemas que generen alertas de uso inadecuado de fondos y evidencien intenciones de incumplir con los procedimientos del BCIE.
Además, hizo un llamado a priorizar inversiones en infraestructuras como carreteras y energía, en lugar de operaciones de apoyo presupuestario con objetivos amplios y ambiguos, y urgió a publicar información completa sobre la solicitud, aprobación, ejecución y cierre de proyectos, incluyendo las fundamentaciones de decisiones ejecutivas.
ASJ ha realizado diferentes acercamientos con el BCIE, en los que ha brindado otro paquete de reformas esperando puedan ser consideradas y tomadas en cuenta lo antes posible, para beneficio de la ciudadanía.