«A mis 17 años de edad ingresé a la institución policial, y hoy con casi 25 años de servicio saque adelante a mis hijos Inspectora de Policía Karen Martínez
-Ha capacitado a más de 8 mil policías en el tema de Derechos Humanos, ya que cuenta con una Maestría en esta área
Tegucigalpa- No cabe duda que el amor de una madre es un claro ejemplo del amor de Dios, este mes consagrado a las madres de Honduras existen muchas historias de valentía, sacrificio y abnegación, tal es el caso de la Inspectora en el Área de los Servicios Karen Martínez, una madre soltera quien procreo cuatro hermosos hijos los cuales son su pilar fundamental para seguir adelante y vencer las adversidades que la vida le presenta.
“Ingrese a mis 17 años de edad como agente de policía, y estando dentro de la institución tome la decisión de superarme, seguí con mis estudios, combinando la operatividad de mi trabajo con los libros” recuerda con mucha nostalgia esta Oficial.
Durante su largo recorrido en la institución se ha desempeñado en diferentes direcciones en donde ha adquirido amplio conocimiento y destrezas, actualmente con casi 25 años de servicio se siente muy orgullosa de todo lo que ha logrado con mucho esfuerzo y dedicación.
Siempre mantuve clara la idea de superación desde que ingresé a la Policía mi prioridad fue continuar mis estudios, fue así como obtuve mi título universitario como Abogada y posteriormente una Maestría en Derechos Humanos, no fue fácil pero cuando tenemos una meta firme todo es posible”.
Madre ejemplar
La Oficial ha sabido combinar su papel de madre y servidora de la patria, y comenta que Dios ha sido su fortaleza para sobrellevar todo lo que implica ser madre soltera “Mi hija mayor tiene 24 años y es licenciada, también tengo un hijo de 19 años que estudia Ingeniería en Zootecnia, otro tiene 16 años y estudia en el extranjero, y mi pequeña de 10 años quien tiene síndrome de Down, este trayecto ha sido cuesta arriba pero hoy me siento orgullosa de ver que mis hijos son jóvenes de bien y profesionales, ese es mi mayor satisfacción” expresó Martínez .
También relató que es un sacrificio grande sobrellevar el papel de madre y proveedora de su hogar, sin embargo su amor por ellos ha roto barreras.
Asimismo, la funcionaria agradeció el apoyo de la institución para poder cumplir sus metas, en toda su trayectoria tuvo la oportunidad de ser parte de diferentes direcciones lo que le permitió adquirir y compartir nuevos conocimientos; fue instructora de Centros de Estudio Policial, Derechos Humanos y también de la Policía Comunitaria donde aprendió a cultivar la empatía y ayudar a los más vulnerables.
Historias como esta son dignas de destacar, en el mes consagrado a la madre hondureña la Policía Nacional rinde homenaje a un ser sagrado a quien Dios eligió para dar vida y amor incondicional.
