El Papa pide tener cuidado con los hipócritas y rechazar el culto a la apariencia
El Papa Francisco pidió a la comunidad cristiana que tengan cuidado con los hipócritas que estén atentos “a no basar la vida en el culto a la apariencia”
El Santo Padre hizo este pedido durante el rezo del Ángelus de este domingo 7 de noviembre en la plaza de San Pedro del Vaticano, donde comentó el episodio evangélico del día.
En él, se narra una escena que tiene lugar dentro del Templo de Jerusalén. Jesús observa “cómo a los escribas les gusta caminar para hacerse notar, ser saludados y reverenciados, y para tener lugares de honor. Y Jesús añade que ‘devoran la hacienda de las viudas rezan con ostensión para hacerse notar’”.
Al mismo tiempo, Jesús contempla otra escena: “Una pobre viuda, precisamente una de las explotadas por los poderosos, echa en el arca del Tesoro del Templo ‘todo cuanto poseía’”.
“El Evangelio nos pone delante de este sorprendente contraste”, destaca el Papa. “Los ricos, que dan lo superfluo para hacerse ver, y una pobre mujer que, sin aparentar, ofrece lo poco que tiene”.
El Papa hizo hincapié en el verbo “mirar”, porque Jesús mira “a quien vive la fe con duplicidad, a esos escribas, ‘debemos mirar’ para no convertirnos como ellos; mientras que a la viuda debemos ‘mirarla’ para tomarla como modelo”.
El Papa insistió en “tener cuidado con los hipócritas y mirar a la pobre viuda”. Sobre todo, “tener cuidado con los hipócritas, es decir estar atentos a no basar la vida en el culto de la apariencia, de la exterioridad, sobre el cuidado exagerado de la propia imagen. Y, sobre todo, estar atentos a no doblegar la fe a nuestros intereses”.
“Esos escribas cubrían, con el nombre de Dios, la propia vanagloria y, aún peor, usaban la religión para atender sus negocios, abusando de su autoridad y explotando a los pobres. Es una advertencia para todo tiempo y para todos, Iglesia y sociedad: no aprovecharse nunca del propio rol para aplastar a los demás, ¡nunca ganar sobre la piel de los más débiles!”.
El Pontífice pidió no olvidar que hay que “estar alerta para no caer en la vanidad, para no obsesionarnos con las apariencias, perdiendo la sustancia y viviendo en la superficialidad”.
“Estemos alerta sobre las falsedades del corazón, sobre la hipocresía, ¡que es una enfermedad peligrosa del alma!”, subrayó.
Para sanarse de esta “enfermedad”, “Jesús nos invita a mirar a la pobre viuda. El Señor denuncia la explotación hacia esta mujer, que, para dar la ofrenda, debe volver a casa sin siquiera lo poco que tiene para vivir. ¡Qué importante es liberar lo sagrado de las ataduras con el dinero!”.
Pero, al mismo tiempo, “Jesús alaba el hecho de que esta viuda da al Tesoro todo lo que tiene. No le queda nada, pero encuentra en Dios su todo. No teme perder lo poco que tiene, porque tiene la confianza en el tanto de Dios, que multiplica la alegría de quien dona”.
De esta manera, “Jesús la propone como maestra de fe: ella no frecuenta el Templo para tener la conciencia tranquila, no reza para hacerse ver, no hace alarde de su fe, sino que dona con el corazón, con generosidad y gratuidad”.
Las monedas de la viuda “tienen un sonido más bonito que las grandes ofrendas de los ricos, porque expresan una vida dedicada a Dios con sinceridad, una fe que no vive de apariencias sino de confianza incondicional”.
“Aprendamos de ella: una fe sin adornos externos, sino sincera interiormente; una fe hecha de humilde amor a Dios y a los hermanos”, concluyó el Papa Francisco su enseñanza.
Nohelia Diaz says:
Es muy razonable la petición del Papa, hay personas que uno las conoce de una apariencia y detrás tienen dos o tres caras más nunca las termina de conocer uno, aveces es la verdad no confiarse en nadie.
Solanyi Izaguirre says:
Una petición que te hace reflexionar del día a día!
En la actualidad se vive de engaños y falsas palabras, reflexionemos lo que está pasando.
Emmanuel Maldonado says:
Es muy entendible la petición del papá y con mucha razón
Hay personas que dentro de la iglesia aparentan ser una persona y fuera de ella son otras, aparentar solo para caer bien
Allan Aguilera says:
Es necesario saber diferencia a los actores de los verdaderos embajadores de los buenos valores que la iglesia aún brinda hoy en día porque como dice la palabra no hay que ser como los hipócritas de las sinagogas que se llenan la boca alucinando las cosas que hacen o en qué creen.
Nelson Espinal says:
el culto de la apariencia es muy peligroso para las personas que caen… por eso hay que aprender a identificarlos
Esly Rodriguez says:
Muy buena petición por parte del Papa Francisco ya que vivimos en un mundo lleno de falsedad e hipocresía, un mundo donde de nada nos sirve ir a darnos golpe de pecho porque volvemos a caer en pecado. El concluye con que aprendamos de ella que una fe sin adornos externos, sino sincera interiormente; una fe hecha de humilde amor a Dios y a los hermanos. Si realmente santificamos las fiestas nos daremos cuenta que no hay necesidad de hacer reuniones (saltando, gritando, llorando) él nos pide que nuestras oraciones deben de ser en silencio con fe y devoción porque estas serán cumplidas.