Secretario de Educación Arnaldo Bueso participó en la XXVII Cumbre Iberoamericana de Ministros de Educación
Tegucigalpa, 07 de septiembre de 2020. El ministro de Educación , Arnaldo Bueso, participó de manera virtual en la XXVII Conferencia Iberoamericana de Ministras y Ministros de Educación.
El lema de la jornada fue la “Innovación para el Desarrollo Sostenible – Objetivo 2030. Iberoamérica frente el reto del Coronavirus”, el cual se vincula con la voluntad de impulsar la innovación en Iberoamérica frente al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En su intervención el secretario de Educación, Arnaldo Bueso, manifestó que con la declaración del estado de alarma por la COVID-19 y el cierre de las escuelas, se puso en evidencia las grandes desigualdades de acceso a la conectividad, de tal forma, que ha tomado mucho espacio lo que se conoce como la brecha digital.
“Si bien las respuestas educativas ante la emergencia a través de planes híbridos ha sido muy importante, y entre combinaciones de entrega de servicios con medios tradicionales y digitales los sistemas educativos han hecho esfuerzos enormes por mantener la conexión entre estudiantes y docentes «, dijo.
Estas acciones son las que han permitido mantener el sistema vigente apangándose a mecanismos de educación a distancia impulsada esencialmente por la educación digital.
Retos del sistema
El funcionario, mencionó que los retos deben de ir orientados a la apropiación del docente sobre el uso de tecnología educativa y la comprensión del teletrabajo como quehacer laboral formal.
De igual manera, a la intermediación permanente y flexible de los docentes en el proceso de educación digital, sobre todo el acompañamiento al estudiante.
Así mismo, contar con el acompañamiento de los padres para el buen uso de la tecnología por parte de los niños pequeños (Educación prebásica por ejemplo), la integración de la pedagogía en la educación digital, el vínculos con los currículos sistemáticos y los espacios colaborativos.
También mencionó que es preciso un sistema de educación digital de código abierto, que facilite mayor evolución, desarrollo, mejoras, y adaptación a las necesidades de la comunidad.
Se requiere de accesos a los programadores locales que puedan usar, escribir, modificar y redistribuir el código y el apoyo de la cooperación nacional e internacional para la gestión de la política educativa de inclusión digital como derecho humano (declarado por UNESCO en mayo de 2009).