Presidente Hernández pide permitir llegada de brigadas médicas y no discriminar pacientes con covid-19
Tegucigalpa. El presidente Juan Orlando Hernández pidió hoy la apertura de la población hondureña para que permita la llegada casa por casa de las brigadas médicas que realizan las pruebas rápidas que identifican oportunamente los casos de covid-19 y abogó por la no discriminación de los pacientes que tengan esa enfermedad.
El mandatario participó en la presentación de un informe, de parte de las autoridades correspondientes, sobre los avances en salud, el arribo de los hospitales móviles, dotación de insumos y equipo médico para los principales centros hospitalarios del país, entre otros temas relacionados con la emergencia por el coronavirus, causante de la covid-19.
Las brigadas médicas, integradas por médicos, enfermeras, técnicos de salud y microbiólogos, se movilizan en los principales barrios y colonias de Tegucigalpa, San Pedro Sula y otras regiones metropolitanas del territorio nacional con el fin de poder identificar los casos sospechosos o casos confirmados positivos de covid-19 para aplicar las medidas y el tratamiento oportuno y así aumentar la probabilidad de vida ante ese virus.
“Les pido por favor que dejen ingresar a las brigadas médicas que están llegando casa por casa para aplicarles las pruebas rápidas de covid-19”, subrayó Hernández.
Sin temor y no discriminación
“También les quiero pedir que la gente no tenga miedo de ir a los centros de salud o a los hospitales al presentar síntomas de covid-19, pues de esa forma podemos salvar vidas de manera pronta y no lamentarnos por llegar tarde a un centro asistencial y perder una vida”, señaló el gobernante.
El jefe de Estado abogó para que la población sea consciente de que esa enfermedad le puede llegar a cualquiera y, por lo tanto, “no debemos discriminar al paciente que tenga covid-19”.
“No es posible que se discrimine a una persona por tener covid-19. No es posible que no se deje enterrar a una persona porque haya muerto por esa enfermedad”, remarcó.
“Debemos reflexionar que no nos gustaría que, Dios no lo quiera, la madre de alguien muera con esa enfermedad y no le permitan que se le pueda enterrar. Eso no se debe permitir”, finalizó Hernández.