Cerca de ocho mil millones de lempiras invirtió el gobierno de Honduras en 2017 para fortalecer a la Policía Nacional
· 120 postas en todo el país fueron construidas o remodeladas
· El año pasado ingresaron 4 mil 770 nuevos policías
· Comayagua es el mejor ejemplo de los resultados que se obtienen cuando se invierte en seguridad
No hay varita mágica para derrotar a la delincuencia, pero sí hay acciones claves que pueden ayudar a neutralizarla y, como en el caso de Honduras, lograr reducir de manera dramática los índices de asesinatos, robos, secuestros y extorsión.
La inversión para construir infraestructuras modernas y cómodas, así como para comprar patrullas, laboratorios, armas y uniformes, ha sido una de las apuestas del presidente Juan Orlando Hernández para recuperar la paz y la tranquilidad del país.
Sólo en 2017, el gobierno invirtió 317 millones de dólares, unos siete mil 562 millones de lempiras.
“Las estadísticas están allí: Honduras llegó a ser considerado la nación más violento del mundo, con 86.5 asesinatos por cada cien mil habitantes. El 2017 cerró con 42.8 asesinatos por cada cien mil habitantes y ya no estamos en esa lista. Pero aún no estoy satisfecho”, dice Hernández.
La inversión tiene motivados a los policías hondureños, ya que cuentan con un apoyo logístico que antes no tuvieron. Símbolo de estos nuevos tiempos son las modernas postas que fueron inauguradas durante 2017. La de Comayagua es una de ellas.
Nuevas instalaciones para una nueva Policía Nacional.
El contraste del Complejo Policial construido de bloque, cerámica y reuniendo todas las comodidades es evidente con la antigua posta que se ubica en el centro de la ciudad y que está a punto de caer.
En las afueras de la ciudad de Comayagua se erige un edificio imponente, con modernas oficinas para atender a la ciudadanía que llega de 21 municipios aledaños en busca de servicio de la Dirección Policial de Investigación (DPI), del departamento de Tránsito y la atención especial e inmediata del 911.
“A mis 21 años de servicio es la primera vez que disfruto de un edificio nuevo. Siempre soñamos con un edificio de esta naturaleza”, dijo el subcomisionado y comandante de la UDEP número 3 en el departamento de Comayagua, Jaime Barahona Oseguera.
Barahona resaltó que con la nueva administración del Estado, y precisamente con el apoyo del mandatario hondureño, se dio este gran paso y un gran logro para la institución policial.
Este solo es el inicio de los cambios en la Policía Nacional en cuanto a infraestructura y logística con nuevas patrullas y todo el equipo con que cuentan para la protección de los ciudadanos y sus bienes -señala.
Las nuevas instalaciones de la Policía Nacional de Comayagua constan de un amplio parqueo, oficinas administrativas, dormitorios para los agentes y celdas preventivas para los privados de libertad que han cometido faltas menores.
Servir y Proteger con entusiasmo
A pesar que el vetusto edificio de adobe que está a punto de ceder se mantiene en actividad, los agentes policiales de Comayagua fijan su mirada en el nuevo Complejo Policial, misma que cuenta con modernas patrullas y logística que les permite realizar su labor con la eficacia que demanda el pueblo hondureño.
Cada día salen a cumplir su trabajo con entusiasmo y con el compromiso de Servir y Proteger a la ciudadanía que hoy más que nunca confía en su Policía Nacional.
“Para mí es un privilegio pertenecer a esta institución tan noble y contar con las nuevas instalaciones que nos han construido. Es un orgullo estar aquí”, dijo la agente de Policía Lorena Sevilla, minutos antes de abordar la patrulla que recorrería diferentes sectores del departamento de Comayagua.
Ella confió que está cerca de cumplir seis años de servicio, lo que le permite hacer una amplia diferencia de la nueva posta policial y la antigua.
“Los dormitorios son muy cómodos y las oficinas donde la ciudadanía viene a interponer sus denuncias o a sacar sus papeles son excelentes”, agregó.
La agente Sevilla también destacó que hoy se transportan en modernas patrullas y que poseen nuevos chalecos y uniformes de trabajo.
Sevilla explicó que cada día la misión es atender a la ciudadanía como policías comunitarios, pues “somos como un enlace con la comunidad y tenemos el compromiso de darle una respuesta inmediata; nosotros estamos disponibles 24/7”.
Beneficio para todos
A parte de albergar a los encargados de la seguridad del departamento, las nuevas instalaciones de la Policía Nacional son aprovechadas por muchos ciudadanos para beneficiarse a través de su trabajo como microempresarios.
Marta Licona, comerciante de comida y de diferentes productos alimenticios en las cercanías de la UDEP 3 de Comayagua, dijo que la moderna instalación de la PN ha sido de beneficio para ella, porque con su negocio cubre los gastos de sus tres hijos y dos nietos.
Los días fuertes para mi negocio son los martes y jueves –dice-: llego a vender entre 2 mil y 2 mil 500 lempiras. Eso es de gran ayuda para la economía de la casa. La construcción de la posta policial en esta zona nos beneficia a nosotros los pobres.
Igual piensa, el taxista Manuel Velásquez, quien destaca las nuevas instalaciones de la Policía de Comayagua y la oportunidad para ellos (los ruleteros) de beneficiarse con la visita de la ciudadanía a las oficinas de la PN.
“Que la Policía tenga nuevas instalaciones nos beneficia a todos, así como por el buen servicio que nos están dando a los habitantes de la zona central”, finaliza.
Construirán varios en el país
El Complejo Policial de Comayagua es el segundo existente en el país, pues el presidente Hernández inauguró el año anterior uno similar en Santa Bárbara y anunció que se construirán más a lo largo y ancho de Honduras.
“Nuestros policías merecen un lugar digno que refleje la dignidad que les queremos dar a estos servidores públicos que han estado olvidados”, dice el mandatario.
La meta de Hernández es que dentro de un par de años no habrá ningún otro país de Centroamérica con instalaciones policiales de este tipo.
Sin embargo, indica que “la construcción de los Complejos Policiales van acompañados de una nueva formación de policías a nivel de agentes y oficiales”.
“Estamos construyendo una Policía Nacional de primer nivel”, asegura.
Hernández añade que mejorar en seguridad también incluye devolverle la dignidad a los agentes policiales, al tiempo que apunta que la entrega de instalaciones policiales como la de Santa Bárbara y Comayagua es parte del antes y después de lo que «estamos construyendo para nuestros policías».
Los policías y militares deben de tener condiciones dignas de trabajo, desde un edificio, hasta la tecnificación y formación de cada miembro de esas instituciones –finaliza diciendo.