El Gobierno de Honduras declaró estado de sitio tras las violentas protestas por los resultados en las elecciones
Por otra parte, el Tribunal Supremo Electoral pospuso el escrutinio de las actas que contenían errores para intentar llegar a un acuerdo con la oposición que denunció fraude
El gobierno de Honduras decretó la noche del viernes un estado de excepción que restringe las garantías a la libre circulación, con el fin de frenar las violentas manifestaciones que se registran en diferentes regiones del país exigiendo que se conceda el triunfo del opositor Salvador Nasralla en las elecciones del domingo.
El decreto ejecutivo aprobado por el presidente Juan Orlando Hernández señala que «queda restringida, por un plazo de diez días (…) la libre circulación de personas» entre las 18:00 y 6:00 horas del siguiente día, anunció el coordinador de los ministros del gobierno, Jorge Ramón Hernández Alcerro.
Añadió que el estado de excepción empezaba este viernes a las 23:00 horass y se exceptúan de ello a representantes del Tribunal Supremo Electoral (TSE), representantes de partidos políticos, observadores nacionales e internacionales y a periodistas acreditados para cubrir las elecciones.
Tampoco se aplicará la restricción de circulación a los trabajadores del transporte carga, entes de socorro, personal médico y de enfermería, miembros de seguridad y justicia, funcionarios del Estado, miembros del cuerpo diplomático y consular, misiones internacionales y al comisionado nacional de Derechos Humanos.
El decreto ordena detener a toda persona en circulación durante las horas de veda o sospechosa de causar daños a otras personas o sus bienes, los que serán llevados a lugares de detención con un registro de cada uno
Por otra parte, el presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), David Matamoros, pospuso este viernes el inicio del escrutinio de actas que contenían errores de los comicios celebrados el domingo, para intentar alcanzar un acuerdo con la izquierdista Alianza de Oposición Contra la Dictadura, que denuncia un «fraude».
Matamoros había anunciado que este viernes se iniciaría la revisión de 1.006 actas denominadas especiales porque tienen errores en los números de votantes.
El presidente del TSE esperaba al ex mandatario Manuel Zelaya, representante de la Alianza y líder de la izquierda hondureña, para empezar el trabajo de escrutinio en la jornada, que contaría con la presencia de observadores internacionales.
Pero la noche del viernes, Matamoros dijo a la prensa que Zelaya planteó nuevas exigencias, por lo cual se reunirían de nuevo para buscar un acuerdo y empezar la revisión de las actas en la mañana del sábado.
Zelaya dijo al telenoticiero Hoy Mismo que demandó cotejar las copias de 5.174 actas que tiene la Alianza para verificar si coinciden con las que el TSE subió al sistema de cómputo.
Los dirigentes de la Alianza tienen dudas sobre el escrutinio de las actas, ya que el sistema informático de cómputo registró interrupciones sospechosas de hasta cinco horas de duración.
Zelaya advirtió además que quieren la revisión de actas y votos de tres departamentos en los que tienen dudas sobre presuntas irregularidades.
«Dentro de tres días tendríamos el resultado, nosotros aceptamos reconocer el resultado final si ellos aceptan estos puntos», aseguró Zelaya.
El ex mandatario llamó a sus seguidores a mantenerse «firmes» en las protestas en las calles pero en forma pacífica, porque algunas manifestaciones derivaron en hechos de violencia.
Con el 94,31 de las actas escrutadas por el TSE, el actual presidente Juan Orlando Hernández, quien busca la reelección, aventaja con 42,92% de los votos, contra 41,42 del opositor Salvador Nasralla.
Tomado de Infobae.com