Buscan dar a conocer el sufrimiento que pasan los niños en Siria por medio de Pokemon Go
Han pasado más de cinco años desde que comenzó la guerra en Siria. Y no siempre es fácil para las partes interesadas lograr que la opinión pública se concentre, de nuevo, en un conflicto a veces parece simplemente no tener solución.
Para muchos que observan desde la distancia, el impacto de los informes que hablan de las consecuencias de las bombas de barril, los ataques suicidas, los civiles torturados y muertos de hambre pueden disminuir con la repetición.
Una de las tácticas que están empleando los activistas para superar el problema es aprovechar el fenómeno cultural en el que se ha convertido el juego para celulares Pokémon Go.
Y Pikachu, Squirtle y Weedle son sólo algunos de los personajes del juego de realidad aumentada que han entrado a escena en forma extraoficial para arrojar luz sobre las duras realidades de la guerra.
Esta semana la oficina de medios de las Fuerzas Revolucionarias de Siria (RFS, por sus siglas en inglés) -un grupo de activistas de medios de comunicación que apoyan a grupos que se oponen al gobierno de Bashar Asad- publicó una serie de fotografías de niños que posan con dibujos de personajes de Pokemon.
Los dibujos llevan una leyenda que identifican al niño que una localidad específica en un área controlada por rebeldes en el norte de Siria.
Las circunstancias en las que las fotos fueron tomadas no están totalmente claras.
Pero Kafr Nabl es un poblado con antecedentes en materia de producción de imágenes para atraer la atención internacional, con frecuencia en busca de apoyo militar occidental contra el gobierno sirio.
El mensaje detrás de los retratos con Pokemon, que han sido compartidos miles de veces en redes sociales, parece ser el siguiente: «Si puedes pasar tanto tiempo persiguiendo criaturas fantásticas imaginarias, ¿por qué no puedes hacer más por los niños que están creciendo en medio de una guerra?».
En vez de buscar Pokemones, el objetivo es encontrar seguridad, educación, suministros médicos u otros recursos esenciales difíciles de obtener para los civiles atrapados en la guerra.