Francisco Guerrero, secretario para el Fortalecimiento de la Democracia de la OEA: “La MACCIH es un modelo hondureño para combatir la corrupción y la impunidad”
Tegucigalpa, 22 de febrero.- El secretario para el Fortalecimiento de la Democracia de la Organización de Estados Americanos (OEA), Francisco Guerrero, dijo hoy en Casa de Gobierno que la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad (MACCIH) es un modelo hondureño para el combate a la corrupción y a la impunidad.
El funcionario llegó hoy a Casa Presidencial en compañía del equipo de trabajo que integra la MACCIH para reunirse con el presidente Juan Orlando Hernández, con quien compareció ante los medios de comunicación para dar a conocer los pormenores de la Misión y las funciones de acompañamiento que realizará en el trabajo de instituciones del Estado relacionadas con la justicia y la seguridad.
“Hoy es un buen día para Honduras, porque después de siete meses de un arduo trabajo, de la negociación de un acuerdo específico, para la instalación de una Misión de Acompañamiento contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras, estamos en Tegucigalpa y agradecemos que el señor Presidente nos reciba”, dijo Guerrero.
“La corrupción y la impunidad es un cáncer que se ha instalado en muchos países de Latinoamérica, y el secretario de la Organización Estados Americanos (OEA, Luis Almagro) ha trabajado de manera denodada junto al Gobierno de Honduras para tratar de construir un modelo originario, un modelo nuevo, un modelo hondureño para combatir a la corrupción y a la impunidad, manifestó.
Guerrero explicó que el trabajo de la MACCIH se hace desde un espacio de independencia técnica, de neutralidad, de acompañar los esfuerzos que haga la institucionalidad a través de sus jueces, de sus ministerios públicos, pero también escuchando las voces de la sociedad civil, de los jóvenes, de los universitarios, del sector empresarial y de las iglesias.
Apoyo a capacidades, no intervención
“Estamos convencidos que a través de este modelo, y vale la pena recordar, es un modelo que no busca la intervención, es un modelo que busca el acompañamiento”, dijo el funcionario de la OEA.
Guerrero enfatizó en que la OEA no es un espacio intervencionista, “todo lo contrario, busca que los países miembros y los países que forman parte de la Organización puedan desplegar sus capacidades, a través de este tipo de programas que son únicos en la región”.
Reconoció que “hay una gran expectativa política y una gran expectativa social y sabemos que hay una gran expectativa por resultados de parte de la misión.”
Guerrero afirmó que lo se busca “es poder conducir un trabajo serio, un trabajo técnico, y que no tiene ni filias ni fobias políticas; somos neutrales porque venimos de otras partes del continente para integrar esta misión”.
El secretario para el Fortalecimiento de la Democracia de la OEA avizoró que “pueden venir mejores tiempos para Honduras, si logramos construir, de la mano de los hondureños, nuevas medidas que puedan contener este fenómeno que ha dañado no solo a este país sino a otros países de la región”.
El funcionario agradeció todas las facilidades que el Gobierno ha dado para el inicio de esta etapa de la MACCIH, reconociendo que “es un camino largo y tenemos que caminarlo juntos”, porque el compromiso tanto de la Organización como de la sociedad hondureña es ir erradicando el fenómeno de la corrupción y la consecuente impunidad, en el propósito que el país pueda tener mejores tiempos hacia adelante”.