Discurso de la Reina Letizia de España en la cena de gala en su honor
Señor Presidente, doña Ana, muchas gracias por su amable recibimiento en mi primer viaje a Honduras, un destino que no es casual. Nuestros dos países mantienen lazos de afecto y respeto desde hace mucho tiempo y estoy segura de que pudieron comprobarlo en su reciente visita oficial a España. Su Majestad el Rey, que conoce muy bien y aprecia de corazón su país, me pide que les envíe todo su cariño.
La elección de Honduras para este primer viaje refleja de manera inequívoca el compromiso y la solidaridad del pueblo español con el hondureño y la voluntad decidida de España de acompañar a Honduras en su camino de progreso y crecimiento.
Mi visita tiene como objetivo conocer de primera mano los proyectos de cooperación española y tener un contacto directo con sus beneficiarios, con sus distintos actores y con nuestros socios. Es, además, mi primer viaje de cooperación y la primera vez que voy a conocer cómo se desarrollan los proyectos sobre el terreno.
Intentar dar visibilidad a este trabajo, tratar de mostrar la utilidad de tantos años de cooperación y de acompañamiento son algunas de las razones por las que estoy aquí. Y no saben la ilusión que me hace poder compartir con ustedes esta nueva experiencia de mi implicación directa con la cooperación española para el desarrollo.
Porque, sin duda, la cooperación para el desarrollo es una parte importante de la política exterior de España y es una muestra de nuestro compromiso para contribuir a la lucha contra la pobreza y a favor de la prosperidad de países con los que nos unen muchos lazos, como es Honduras, nación prioritaria en el último Plan Director de nuestra cooperación.
Esta cooperación se remonta a varias décadas y ha tenido momentos de gran visibilidad, como el apoyo humanitario prestado tras el paso del huracán Mitch, una circunstancia que nos permitió comprobar la entereza del pueblo hondureño y su entrega para sobreponerse a las dificultades.
Durante estos años, la cooperación ha abarcado- y abarca hoy-muchos ámbitos de actuación y son muchos los españoles que han venido a contribuir a su desarrollo a través de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) o de distintas ONG,s y que han aprendido a querer a Honduras y a los hondureños.
Pero nuestra cooperación con Honduras no es sólo pasado, también es presente y futuro. El marco de Asociación País, recientemente firmado y elaborado con el concurso del gobierno y la sociedad civil hondureña, dibuja las líneas maestras de nuestra cooperación en los próximos cuatro años. Gobernabilidad democrática y Estado de Derecho, desarrollo local, promoción de igual de género, agua y saneamiento, seguridad alimentaria, generación de empleo digno, son algunas de ellas.
Mañana, en Tegucigalpa y Comayagua tendré ocasión de visitar varios proyectos que concretan y ponen en práctica estas ideas. Con ellos perseguimos ser más eficaces en la gestión de nuestros fondos para lograr un mayor impacto en nuestras acciones. Además, nuestra experiencia nos ha servido para ser depositarios de la confianza de la Unión Europea (UE) y gestionar proyectos de cooperación delegada.
Señor presidente, gracias, de corazón, por recibirme de una manera tan afectuosa. Quiero ahora brindar con todos los presentes por su ventura personal y la de su esposa, por la prosperidad de Honduras y por la gran amistad de nuestros pueblos.