Francisco exigió a los obispos que no encubran casos de pederastia
«No hay ningún lugar en el ministerio para los que abusan de los menores», afirma Francisco en la carta a obispos de todo el mundo, publicada un día antes de la primera reunión en el Vaticano de una comisión de expertos sobre la protección de menores.
Esta solicitud del Papa fue llevada a cabo pocos días después de que un juez español imputara a 10 sacerdotes de ese país por casos de abuso sexual de los que se ocupó personalmente el Santo Padre, tras haber sido alertado por una de las víctimas.
El escándalo estalló en noviembre luego de que la víctima informara de los abusos sexuales que habría sufrido siendo menor en Granada, en el sudeste de España, en una carta dirigida al Sumo Pontífice, quien lo animó a denunciarlo en la Justicia.
Según el expediente judicial, con fecha del lunes, hay 10 curas y dos laicos imputados como autores o cómplices de los presuntos abusos cometidos contra el por entonces adolescente entre 2004 y 2007, cuando tenía entre 14 y 17 años, en un chalet con piscina en Granada.
La víctima, ahora de 25 años recién cumplidos y miembro del Opus Dei, fue seducido por el cura de la parroquia que frecuentaba como participante del coro. Manipulando su fervor religioso, le prometió un buen futuro como religioso y lo culpabilizaba cuando rechazaba sus tentativas, según figura en el expediente.
En el escrito, el magistrado se interroga sobre la prescripción de algunos de los hechos.
El Papa Francisco había expresado el 25 de noviembre pasado su «grandísimo dolor» luego de haberse enterado de este caso a través de una carta en que la víctima le explicaba los hechos y afirmaba temer que otros menores también estuvieran afectados.
«Recibí la carta, la leí, llamé a la persona y le dije: ‘Mañana ve a ver al obispo'», contó el Santo Padre, quien le escribió al obispo de Granada «para que empezara el trabajo, hacer la investigación e ir adelante», explicó el propio Francisco.
«¿Cómo lo estoy viviendo? Con gran dolor, con grandísimo dolor. Pero la verdad es la verdad, y no debemos esconderla», afirmó la máxima autoridad del Vaticano.
Tras su elección en marzo de 2013, el papa Francisco defiende la tolerancia cero contra la pederastía, que podría haber generado decenas de miles de víctimas en el mundo y desacreditó fuertemente a la Iglesia Católica.