Por los insultos a sus líderes supremos, Irán ahora apunta a cerrar aplicaciones móviles
La Justicia iraní le dio un mes de plazo al régimen de Hasan Rohani para que controle los contenidos de aplicaciones como WhatsApp, Viber o Tango o que las cierre por completo, tras la difusión de agravios contra el fallecido ayatollah Ruholá Khomeini y el actual Alí Khamenei.
El vocero del vicejefe del Poder Judicial, Gholam Hosein Mosení Ezheí, le envió una carta al ministro de Educación, Mahmud Vaezí, en la cual lo insta a filtrar esas redes o cerrarlas, según informó este domingo el periódico reformista Sharq.
El pasado mes de mayo, el presidente de Irán, Hasan Rohani, ordenó que no se cerrase la red de mensajería móvil WhatsApp, luego de que el organismo oficial que controla el contenido de Internet anunciase que se iba a bloquear.
El ministro Vaezí señaló entonces que el Gobierno considera que no hay que prohibir las redes sociales que no sean dañinas y que, además, no tienen un equivalente local en Irán.
La carta del Poder Judicial advierte ahora al Ejecutivo de que «si el ministerio no prepara las herramientas técnicas para filtrar (los contenidos) de las redes que publican contenidos criminales, la Justicia tomará la acción apropiada para bloquearlas, en línea con su deber constitucional».
La advertencia se produce después de que, en las últimas semanas, la Policía advirtiese sobre el masivo intercambio de bromas en esas redes que ridiculizan al fallecido ayatollah Ruholá Khomeini, fundador de la República Islámica, y a su sucesor Alí Khamenei, algunas de ellas a cuenta de su reciente operación de próstata.
El Poder Judicial condena en la carta la «amplia difusión de contenidos delictivos, inmorales, contrarios a la honestidad, la ética islámica y la seguridad pública» y destaca «especialmente la amplia difusión en las últimas semanas de contenidos ofensivos contra el fundador de la Revolución Islámica, el imán Khomeini».
Además, le recuerda al ministro que ya le habían dado un plazo de tres meses para que pusiera en marcha medidas para filtrar los contenidos y crear redes sociales y de comunicación propias, porque las que se utilizan ahora «se dirigen desde el extranjero y por gobiernos opositores del sistema de la República Islámica».
Este encontronazo es el último ejemplo del choque que el conservador Poder Judicial iraní mantiene con la administración del más moderado Rohani, quien ganó las elecciones en 2013 tras prometer mayores libertades sociales.
Irán bloquea el acceso a redes sociales en Internet como Facebook y Twitter, además de a millones de páginas de la red, a las cuales sólo se pueden acceder desde el país a través de herramientas antibloqueo, como proxies o VPN.
Tomado de Infobae