Operativos policiales nocturnos en SPS, para verificación de negocios a fin de prevenir exposición de menores a ambientes inadecuados
San Pedro Sula, Cortés. Sábado 3 de agosto de 2024.— En la madrugada de hoy, un equipo multidisciplinario conformado por la Policía Nacional Región Valle de Sula, la Dirección Nacional de Prevención y Seguridad Comunitaria (DNPSC), la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Interpol Honduras, el Ministerio Público y la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), ha iniciado una serie de operativos destinados a la recuperación de menores en riesgo social y al combate del delito de trata de personas.
Esta operación, que se desarrollan durante la noche y la madrugada, se centran en tres áreas clave:
Se verifica el cumplimiento de las leyes y regulaciones que prohíben la entrada y permanencia de menores en bares, discotecas y cantinas, establecimientos donde su presencia está estrictamente prohibida por la legislación hondureña.
La Ley de Protección Integral de la Niñez y la Adolescencia (LEY-14-2005) establece que los menores de edad no pueden asistir a estos lugares debido a los riesgos asociados con el ambiente y las actividades que se desarrollan en ellos, tales como el consumo de alcohol y sustancias prohibidas, así como la exposición a situaciones de vulnerabilidad y explotación.
Además, se realiza la intervención para proteger a menores que se encuentren en situaciones de riesgo o vulnerabilidad.
Esto incluye la identificación y asistencia a aquellos que puedan estar siendo explotados laboral o sexualmente, o que estén involucrados en actividades delictivas debido a su entorno social adverso.
Se lleva a cabo la búsqueda y detención de individuos y redes dedicadas a la trata de personas.
Este delito, severamente penado bajo la Ley contra la Trata de Personas, busca prevenir y erradicar las actividades que explotan a personas, especialmente a menores, mediante la coerción, engaño o manipulación.
El enfoque integral de estos operativos busca una sociedad más segura y protegida para todos, especialmente para los menores, quienes deben estar resguardados de situaciones que puedan poner en riesgo su bienestar y desarrollo.
Las instituciones involucradas trabajan de manera coordinada para asegurar el respeto a las normativas y para brindar protección efectiva a quienes más lo necesitan.